Según el experto, Malasia tiene una economía estable y fuerte gracias a bases macroeconómicas sólidas. La economía del país del sudeste asiático se encuentra en una fase de crecimiento a pesar del impacto potencial de una serie de desafíos globales, como las tensiones geopolíticas y el aumento de las tasas de interés en los países desarrollados.
Con respecto al ringgit (RM), el experto dijo que el tipo de cambio fluctuará entre 4,17 y 4,44 RM por dólar estadounidense según varios factores.
En primer lugar, el dólar se debilitará en 2024 porque la Reserva Federal de Estados Unidos planea bajar las tasas de interés para estimular la economía. Esto hará que el ringgit se aprecie en 2024, dijo.
En segundo lugar, los precios más altos del petróleo impulsarán la moneda, ya que el petróleo deviene una de las principales exportaciones de Malasia. En tercer lugar, la industria del turismo apoyará la economía a medida que más turistas visiten el país, contribuyendo así a impulsar los negocios y el consumo locales.
Finalmente, la inversión extranjera directa (IED) fluirá hacia Malasia desde muchas fuentes diferentes, como China, Singapur, Europa y Estados Unidos. El experto dijo que la IED es esencial para el desarrollo macroeconómico porque representa los esfuerzos del Gobierno de Malasia para garantizar la estabilidad política y el potencial de crecimiento del país.
Shan sostuvo que el Gobierno de Malasia, bajo el liderazgo del Primer Ministro Anwar Ibrahim, está haciendo todo lo posible para mantener el impulso económico y esto resulta muy importante para las perspectivas macroeconómicas.
El experto también destacó que el consumo y la inversión son los principales motores del crecimiento económico. Mientras tanto, diversos sectores, como la manufactura, la construcción, el sector inmobiliario, la tecnología y la energía, están atrayendo inversiones activas, tanto a nivel nacional como internacional.