Durante una entrevista sobre el tema con reporteros de la Agencia Vietnamita de Noticias, Nguyen Khac Giang subrayó que la lucha contra la INDNR ha sido identificada por el Gobierno de la nación indochina como una de las principales prioridades, inmediatamente después de que la CE impusiese la tarjeta amarilla de advertencia para la pesca y las exportaciones de productos acuáticos vietnamitas al mercado del viejo continente en octubre de 2017.
El Gobierno vietnamita y todo el sistema político, desde el nivel central hasta el local, están involucrados en la actividad, mostrando la gran determinación y esfuerzo para resolver la cuestión, resaltó.
Uno de los puntos más brillantes en los esfuerzos de Vietnam por eliminar la "tarjeta amarilla" es que se ha centrado en elaborar un marco legal para combatir las actividades ilegales, especialmente la promulgación de leyes, decretos, regulaciones, circulares y documentos de orientación específicos enviados a los Ministerios, ramas y localidades, señaló.
Se puede decir que existe un gran consenso en términos de política para manejar la INDNR, y esto no sólo es muy apreciado a nivel interno, sino que incluso la CE valora los esfuerzos de Vietnam, remarcó.
El segundo punto destacado, apuntó, es la cooperación internacional para resolver cuestiones relacionadas con la esa pesca ilegal. Al mismo tiempo, dijo que Vietnam ha colaborado activamente con los Estados que se encuentran en la misma situación en la zona como Indonesia, Filipinas y Malasia, así como ha trabajado con Estados Unidos y Australia a través de acuerdos cooperativos al respecto.
Otro cambio positivo es que la nación indochina ha monitoreado mejor la implementación y el cumplimiento de las leyes relacionadas con la actividad pesquera. Las localidades han intensificado la supervisión de las actividades de los barcos y han instado a los propietarios a instalar los sistemas de seguimiento de embarcaciones (VMS).
Sin embargo, hay dos cuestiones que Vietnam aún no ha resuelto por completo, pues persisten los navíos pesqueros que realizan las actividades en aguas extranjeras y la trazabilidad del origen de los productos acuáticos no se ve realmente eficaz.
La CE enviará en octubre venidero una delegación de inspección al país del sudeste asiático, con el objetivo de revisar los resultados alcanzados en el enfrentamiento a la pesca ilegal y las dificultades que enfrenta el país en este sentido, comunicó.
Resulta necesario minimizar las violaciones mediante el aumento de la inspección de las actividades de los barcos y la divulgación para elevar la conciencia de los pescadores y manejar estrictamente las infracciones, entre otros aspectos relativos, recomendó.
La advertencia de "tarjeta amarilla" de la CE hace que la exportación de productos vietnamitas a otros países sea mucho más difícil, y los rubros están sujetos a mayores niveles de inspección.
Además, los consumidores, especialmente en los países desarrollados y los principales mercados de Vietnam, como Japón, Europa y Estados Unidos, están prestando cada vez más atención al desarrollo sostenible.
Las cuestiones relacionadas con aranceles, normas y regulaciones también se vuelven más estrictas, lo que provoca más retrasos en las exportaciones y complica los envíos de los productos acuáticos, que requieren mantenerse frescos. Si el producto se encuentra en un almacén y luego se pierde tiempo en inspección, disminuye su calidad.