En un contexto de rápido crecimiento de la economía digital, los métodos de pago electrónicos se han extendido entre la población y las empresas. La rapidez y simplicidad de las transacciones sin efectivo permiten un mejor flujo comercial, lo que contribuye a aumentar el consumo y la rotación de bienes.
En un pequeño mercado del barrio Tuong Mai, en Hanói, Hoa, una vendedora de verduras con casi 15 años de experiencia, recibe cada día cientos de pagos mediante códigos QR. Gracias a ello, ya no necesita registros manuales y puede controlar ingresos, gastos y beneficios directamente desde la aplicación bancaria.
Nguyen Duc Le, subjefe Departamento de Operaciones de la Gestión de Mercados del Ministerio de Industria y Comercio, señaló que los pagos sin efectivo eliminan barreras físicas y reducen la “fricción” en las transacciones, especialmente en operaciones de bajo valor. Cuando el pago es sencillo, los consumidores tienden a gastar más, lo que impulsa sectores como el comercio minorista, la restauración, el turismo y los servicios personales.
El sistema de pagos QR desarrollado por la Empresa Nacional de Pagos de Vietnam (Napas), que incluye VIETQRPay para transacciones nacionales y VIETQRGlobal para pagos transfronterizos, se está expandiendo rápidamente. Además de beneficiar a consumidores y empresas, estos sistemas permiten a las autoridades supervisar mejor los flujos financieros, reducir la evasión fiscal y detectar a tiempo operaciones inusuales.
Según Mai Son, subdirector del Departamento de Impuestos del Ministerio de Finanzas, los datos de transacciones en tiempo real son fundamentales para mejorar la transparencia, reducir riesgos y proteger a los consumidores.
Asimismo, la adopción del QR prácticamente no implica costos elevados, lo que facilita que millones de pequeños negocios accedan a los pagos digitales.
Datos de Napas correspondientes a los primeros diez meses de 2025 muestran que las transacciones VietQR aumentaron un 52 por ciento en volumen y un 85 por ciento en valor, reflejando la fuerte expansión de los pagos sin efectivo. Este avance constituye una base clave para que Vietnam impulse el desarrollo de su economía digital en el período 2025–2030.
