Tran Phu Lu, subdirector del Centro de Promoción de Comercio e Inversión de Ciudad Ho Chi Minh (ITPC), dijo que en 2022, la economía de Vietnam creció de manera impresionante, además de tener una recuperación más rápida de lo esperado en los sectores de manufactura, servicios y consumo interno, las exportaciones también constituyeron un gran motor impulsor del desarrollo.
En 2023, se pronostica que las dificultades en la economía y el comercio mundial persistirán hasta principios del año, y el crecimiento de las exportaciones de Vietnam dependerá de la inflación, las medidas preventivas contra la pandemia de los grandes países, así como la situación económica en los principales mercados receptores, señaló, pero aseveró que se trata también de una nueva oportunidad para que las empresas nacionales continúen manteniendo el ritmo de las ventas al exterior y aprovechen efectivamente las ventajas existentes.
En concreto, las firmas vietnamitas disfrutan de reducciones arancelarias preferenciales de los acuerdos de libre comercio que el país ha firmado, especialmente los tratados de nueva generación, detalló.
Por otro lado, muchos productos nacionales han mejorado gradualmente la calidad y la reputación, particularmente bienes agroforestales, pesqueros, textiles y electrónicos, calzado, teléfonos y componentes, artículos que representan una gran proporción en la estructura de los envíos al extranjero, apuntó.
La estructura de las exportaciones de Vietnam también va desviando de materias primas a productos procesados y manufacturados con alto valor agregado, sostuvo y recomendó a las compañías aprovechar bien esta oportunidad para seguir ampliando los mercados de venta y aumentar sus ingresos.
Se trata de una nueva oportunidad para que las empresas nacionales continúen manteniendo el ritmo de las ventas al exterior (Fotografía: VNA) |
Alex Tatsis, jefe de la sección económica del Consulado General de Estados Unidos en Ciudad Ho Chi Minh, subrayó que su país valora la adaptabilidad de la cadena de suministro y, a lo largo de los años, Vietnam deviene uno de los países más beneficiados del desplazamiento de los negocios fuera de China.
Actualmente, Vietnam es el décimo mayor socio comercial de Estados Unidos en el mundo y un nodo importante en la cadena de suministro de bienes esenciales para la economía del país norteamericano, desde semiconductores para la producción de teléfonos y automóviles hasta paneles solares para impulsar la revolución de las energías limpias y la adaptación al cambio climático, destacó el diplomático.
Los eslabones de la cadena de suministro de Estados Unidos con Vietnam no solo son unidireccionales, sino que avanzan cada vez más hacia el equilibrio, resaltó, y explicó que el país indochino también compra chips de computadoras, madera dura, algodón y pienso de su nación para usarlos como materia prima para la producción de semiconductores, muebles, prendas de vestir y mariscos.
El comercio bilateral ayuda a Vietnam a desarrollar su economía y exportar a mercados de todo el mundo, patentizó, y enfatizó que Estados Unidos presta especial atención a la inversión para ayudar al país del Sudeste Asiático a fortalecer su papel en la cadena de suministro global a largo plazo.
Específicamente, Estados Unidos creará condiciones favorables para aumentar el comercio y la competitividad del sector privado en Vietnam, ayudando a las pequeñas y medianas empresas a mejorar su capacidad de producción, acceder a recursos financieros y acelerar la transformación digital, señaló.