Al intervenir en la ceremonia inaugural de la presidencia de energía de la Asean 2023 del país en Yakarta la semana pasada, Arifin destacó que los países de la Asean necesitan tecnologías accesibles bajas en carbono y financiamiento a bajo interés de múltiples fuentes para lograr sus objetivos de cero emisiones netas.
Es por eso que Asean necesita financiamiento de economías desarrolladas e instituciones financieras globales como la Asociación para la Transición Energética Justa (JETP) y la Comunidad de Emisiones Cero de Asia.
El bloque se ha fijado el objetivo de lograr una participación de energías renovables del 23 por ciento en su suministro total de energía primaria y del 35 por ciento en la capacidad de energía instalada para 2025. También se espera que los estados miembros alcancen sus contribuciones determinadas a nivel nacional para 2030 y, finalmente, emisiones netas cero para 2050.
De acuerdo con Arifin, Indonesia espera que todos los países miembros de la Asean declaren sus objetivos de cero emisiones netas en la 41ª Reunión ministerial sobre energía, en agosto de este año.
Hizo hincapié en que su compromiso conjunto se convertirá en la piedra angular de la hoja de ruta de cero emisiones netas de la Asean.
La hoja de ruta servirá como un plan de acción para una transición energética justa, asequible, confiable y sostenible que no deje a nadie atrás, siguiendo las condiciones sociales y económicas, así como las prioridades de los respectivos países de la Asean, agregó.
Asean ahora tiene 17 mil gigavatios de potencial de energía renovable. Algunos miembros de la Asean, incluida Indonesia, están bendecidos con abundantes minerales críticos, un pilar para las tecnologías de energía limpia como los vehículos eléctricos, dijo Arifin, y agregó que la Asean necesita esfuerzos conjuntos para construir la industria aguas abajo en la región de la Asean.