An Bang, de un pueblo pesquero en una aldea turística

La playa de An Bang es un lugar que no se puede dejar pasar en la visita al casco antiguo de Hoi An. Este sitio se ubica a 3 kilómetros de Hoi An y a 22 kilómetros de la ciudad colindante de Da Nang.

Un día soleado en la playa de An Bang. (Fotografía: www.vntrip.vn)
Un día soleado en la playa de An Bang. (Fotografía: www.vntrip.vn)

An Bang se considera el alma de Hoi An, con la arena fina de color marfil en una playa larga con olas tranquilas que rompen en la costa, creando así una playa original de la tierra Hoi.

La primera razón por la cual An Bang se ha convertido en un destino turístico atractivo es porque preserva intacta su belleza primitiva, seduciendo a numerosos turistas.

Cuanto más se adentran los excursionistas en esta área turística, más tranquilos se sentirán a través de sus experiencias en las casas sencillas pero románticas denominadas “homestay”.

Decoraciones sencillas en el interior y un espacio abierto hacen resaltar el conjunto arquitectónico de estas casas ajardinadas muy cercanas a la vida de los pobladores en el campo de la tierra Hoi.

Por eso, el pueblo de An Bang atrae cada vez a más visitantes extranjeros, quienes buscan un ambiente fresco y sumergirse en la identidad cultural de Hoi An con su sencillez y tranquilidad características.

Los servicios de “homestay” en An Bang son numerosos. Hace seis años, este fue un lugar de pescadores con pocos recursos económicos y nadie pensó que se convirtiera posteriormente en una aldea turística, hecho calificado de “milagroso”.

Las viviendas rudimentarias ahora son casas de “homestay” muy cómodas y rebosantes de la identidad cultural de los autóctonos.

Se puede percibir una vitalidad completamente nueva detrás de los pequeños caminos sinuosos así como en el interior de las casas campestres sencillas de los pescadores de An Bang.

Entre los “homestay” destaca The Chi Villa, una hermosa y peculiar vivienda que se encuentra escondida en este pueblo pesquero pacífico.

Con las singularidades de la cultura local en cada pequeño detalle, esa obra ganó el primer premio en el Concurso de la Casa del Sueño lanzado por la Asociación de Arquitectos de Vietnam.

Es un sencillo pueblito cerca del mar, pero An Bang posee una extraña atracción gracias al talento de los arquitectos, quienes convirtieron los espacios humildes en coloridos jardines y alojamientos de “homestay” típicos de Hoi An.