Según Do Viet Phuong, jefe de la Oficina Comercial de Vietnam en Camboya, el comercio bilateral de bienes se triplicó entre 2014 y 2024, pasando de 3,3 mil millones de dólares a 10,1 mil millones de dólares, con una tasa de crecimiento anual promedio de alrededor del 12 por ciento. El impulso de crecimiento se ha mantenido en 2025, con un comercio que casi alcanzó los ocho mil millones de dólares en los primeros ocho meses.
La viceministra de Industria y Comercio Phan Thi Thang afirmó que Camboya, un vecino cercano con una ubicación estratégica, desempeña el papel de puerta de entrada y centro de tránsito en la subregión del Mekong. Ambos países han construido un sólido marco legal mediante acuerdos clave, como el memorando de entendimiento de 2019 sobre el desarrollo de infraestructura y conectividad comercial fronteriza, el acuerdo comercial fronterizo de 2024 y el plan de acción correspondiente a la etapa 2025-2026 para impulsar el comercio bilateral.
El subsecretario de Estado de Comercio de Camboya, Tith Rithipol, destacó que Camboya y Vietnam no solo son vecinos cercanos, sino también socios de confianza. Camboya ofrece a las empresas vietnamitas oportunidades atractivas gracias a su estabilidad política, una fuerza laboral joven, una ubicación estratégica e incentivos favorables para la inversión, afianzó.
Expertos señalaron que las dos economías son complementarias, más que competitivas. Bui Quang Hung, subdirector general de la Agencia de Promoción Comercial de Vietnam, dependiente del Ministerio de Industria y Comercio, puntualizó que su nación cuenta con fortalezas en productos agrícolas procesados, bienes de consumo, materiales de construcción y maquinaria, que satisfacen la fuerte demanda de importaciones de Camboya.
El comercio bilateral también está prosperando a nivel local. El vicepresidente del Comité Popular de la provincia de Tay Ninh Nguyen Hong Thanh aseguró que el comercio con las localidades camboyanas ha superado los dos mil millones de dólares.
Asimismo, Toch Sokhon, director del Departamento de Comercio de la provincia camboyana de Tbong Khmum, recalcó los diversos intercambios entre ambas provincias, incluyendo plátanos, caucho y mandioca de su localidad, así como verduras frescas y materiales de construcción de Tay Ninh, con una facturación anual de cientos de millones de dólares.
Sin embargo, persisten desafíos. Según Quang Hung, el subdesarrollo de la infraestructura de transporte y el almacenamiento en algunos pasos fronterizos ha incrementado los costos logísticos, mientras que las diferencias en los estándares técnicos y la limitada información sobre el mercado dificultan las estrategias a largo plazo.
Viet Phuong añadió que las empresas vietnamitas en Camboya enfrentan dificultades para adaptarse a los diferentes sistemas administrativos, las barreras del idioma jemer, los altos costos de los servicios y la dura competencia de los productos chinos y tailandeses.
Para superar esos desafíos y alcanzar la meta de 20 mil millones de dólares, expertos y funcionarios han propuesto un conjunto integral de soluciones que requieren una estrecha coordinación entre ambas partes.
La viceministra Phan Thi Thang instó a una inversión sincronizada en infraestructura comercial fronteriza, logística, instalaciones de almacenamiento y mercados fronterizos, además de acelerar la adopción de modelos de puestos fronterizos inteligentes para impulsar las exportaciones.
Por la parte camboyana, Tith Rithipol propuso modernizar la infraestructura comercial fronteriza, fortalecer la logística transfronteriza y los enlaces de transporte, y profundizar la colaboración en marcos regionales como la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean) y la Asociación Económica Integral Regional (RCEP).
También invitó a las empresas vietnamitas a invertir en sectores de alto valor de Camboya, como la agricultura moderna, el procesamiento de alimentos y la tecnología digital.