Según la encuesta de Gallup, realizada en 2023 y publicada en junio de 2024, muchos países del Sudeste Asiático tienen tasas relativamente altas de hogares preparados para responder a catástrofes naturales: Filipinas (84 por ciento), Vietnam (83 por ciento), Camboya (82 por ciento) y Tailandia (67 por ciento).
Según Gallup, la coordinación entre los países del Sudeste Asiático ha desempeñado un papel importante en la reducción de los riesgos de catástrofes naturales, con un enfoque regional que incluye sistemas de alerta temprana, participación y cooperación de las comunidades y acceso a financiación para la preparación ante desastres. Esto demuestra que incluso los países con recursos limitados pueden hacer un uso eficaz de los sistemas de alerta temprana y dotar a las familias de los medios necesarios y capacidades para responder a las catástrofes naturales.
Benedict Vigers, consultor de investigación de Gallup, afirmó que el éxito del Sudeste Asiático en cuanto a la preparación ante desastres naturales se puede vincular a su alta exposición a estas catástrofes, sus niveles relativamente altos de resiliencia y el enfoque y la inversión de la región hacia la gestión del riesgo de desastres naturales.
Añadió que el Sudeste Asiático está situado a lo largo del anillo de fuego del Pacífico, un cinturón de inestabilidad sísmica de 40 mil kilómetros de longitud que abarca el 75 por ciento de los volcanes de la Tierra y produce el 90 por ciento de sus terremotos.
En el futuro cercano, los riesgos ambientales como tormentas severas, inundaciones, incendios forestales y sequías continuarán obligando a los países a concentrarse en garantizar que sus ciudadanos estén preparados para las peores situaciones.