Esa declaración se produjo tras el registro formal de Vietnam ante la OACI el pasado 30 de junio.
Impulsado por la OACI, el programa CORSIA tiene como objetivo lograr un crecimiento neutro en emisiones de carbono en la aviación internacional desde 2020. Bajo este mecanismo, los países participantes deben monitorear, reportar y compensar las emisiones de CO2 generadas por vuelos internacionales mediante la compra de créditos de carbono.
Hasta el momento, el Ministerio de Construcción (anteriormente Ministerio de Transporte) y la AACV han implementado activamente las medidas necesarias para cumplir con los requisitos de CORSIA. Entre ellas destacan la emisión de una circular para gestionar el consumo de combustible y las emisiones de CO2 en aeronaves, la creación de un sistema de monitoreo, reporte y verificación (MRV) para las emisiones en vuelos internacionales, y la entrega a la OACI de datos de emisiones correspondientes al período 2019-2024.
Asimismo, la AACV ha llevado a cabo estudios sobre políticas globales y específicas de sostenibilidad en la Unión Europea, y ha realizado múltiples consultas con ministerios y agencias relevantes para evaluar los retos de incorporarse a la fase voluntaria de CORSIA y a las nuevas regulaciones europeas en materia de desarrollo sostenible.