Desde un pequeño muelle, en pocos minutos navegando por el río, los excursionistas se encontrarán a la vista el tranquilo e inmenso lago.
A primeras horas de la mañana, el paisaje de Na Hang – Lam Binh parece salir de un cuento de hadas cuando las nubes blancas todavía cubren las montañas que rodean el lago.
Este sitio lleva un poco del encanto prístino de Ba Be, el lago natural más grande en Vietnam, con pequeñas embarcaciones solitarias en medio de la gran superficie de agua y árboles silvestres.
Los visitantes podrán descubrir la fascinante ‘bahía de Ha Long’ reflejada en las islas flotantes y los pilares de piedra natural en el medio de esta laguna.
La cordillera formada por 99 montañas, asociada con la leyenda local sobre el ave fénix que buscaba la nueva capital, se ilumina con los primeros rayos del sol que empiezan a dispersar las nubes.
Bajo la brillante luz, la cascada de Khuoi Nhi es uno de los muchos paisajes interesantes de aquí que pueden traer experiencias inolvidables para los visitantes. Tras bajarse del barco, los turistas recorrerán durante 30 minutos una senda que atraviesa los bosques, riachuelos y cuestas con piedras como escalones para llegar al destino. Una hermosa “franja de seda” que cae desde las alturas de decenas de metros y una cueva secreta escondida detrás constituyen el mágico encanto de Khuoi Nhi.
Según los locales, muchas personas llegan a este lago natural para bañarse en el verano. Mientras en el invierno, se puede obtener una experiencia única en las aguas frías, a cambio de un masaje hecho por los diminutos peces que viven en la orilla del lago.
Con solo un corto recorrido por Na Hang – Lam Binh, la imagen de uno de los lagos más bellos de Vietnam seguramente quedará grabada en la mente de muchos visitantes.