Según el artículo, la reunión anual del Foro Económico Mundial (FEM) en Davos, que se realiza del 20 al 23 de enero, brinda una gran oportunidad para consolidar la posición del país del Sudeste Asiático.
El artículo afirma que Vietnam está confirmando su creciente papel como actor importante en la economía global, pues con su amplio potencial está atrayendo cada vez más la atención de inversores y empresas de todo el mundo.
Vietnam, que emerge como una de las economías que vincula a Estados Unidos y China, ha alcanzado varios logros, incluido el progreso en los ingresos de importación y exportación, convirtiéndose en una de las economías más destacadas de la región de Asia y el Pacífico, señaló el texto.
Al igual que otros países de todo el mundo, ha estado implementando una serie de reformas políticas y administrativas significativas. Se trata de cambios sin precedentes en un país que prioriza el mantenimiento de la estabilidad política para el desarrollo, puntualizó el autor.
Según el artículo, la participación regular de Vietnam en el foro del FEM en Davos también demuestra que el país deposita importantes expectativas en el entorno multilateral para los objetivos de desarrollo. La segunda presencia del primer ministro vietnamita, Pham Minh Chinh, en el evento subraya el surgimiento del país como potencia económica. Vietnam no es solo un socio económico atractivo, sino también es un destino estratégico para el futuro.
El artículo destaca que la nación indochina ha mostrado un crecimiento económico impresionante en las últimas dos décadas. En 2024, su Producto Interno Bruto (PIB) creció alrededor del siete por ciento a pesar de las incertidumbres económicas mundiales. Esta resiliencia económica se basa en varios pilares, entre ellos una población joven y dinámica, una rápida urbanización y un aumento de la inversión extranjera.
Además, se está consolidando como un centro mundial de manufactura y exportación, en particular en los sectores de la electrónica, los textiles y la agricultura. Las empresas globales como Samsung, Intel y Nike han establecido importantes bases de producción allí. Esto se atribuye a los costos laborales competitivos, una fuerza laboral calificada y una infraestructura logística en constante mejora.
El Gobierno vietnamita está fomentando activamente la innovación y la transición a una economía digital. Las iniciativas para desarrollar empresas tecnológicas emergentes, servicios basados en inteligencia artificial y transformación digital en sectores clave están creando un ecosistema fértil para las empresas tecnológicas, significó el analista.
Vietnam también ha establecido objetivos ambiciosos para el desarrollo sostenible. Al adoptar políticas centradas en la energía renovable y las prácticas comerciales responsables, el país está atrayendo a inversores conscientes del medio ambiente y proyectos ecológicos, reflexionó el autor.
