De acuerdo con la fuente, se reportaron hasta finales de septiembre 219 extranjeros que recibieron ese nuevo tipo de visa en Japón, de los que 93 provinieron de Vietnam, 33 de Indonesia, y 27 de Filipinas.
En particular, 49 personas laboran en la industria de procesamiento de alimentos, 43 en la fabricación de máquinas industriales, y otras 42 en la producción de materias primas, especificó.
Al mismo tiempo, esta autoridad expresó el deseo de que aumente la cantidad de trabajadores foráneos en Japón, a través de la organización de exámenes de reclutamiento laboral previstos para finales de marzo del año próximo.
El Gobierno japonés adoptó esa política de visado, con el objetivo de atraer a más empleados extranjeros a este país, en el contexto de la escasez de manos de obra.
Según las nuevas normas, los trabajadores de otros países, que satisfacen los requerimientos sobre el conocimiento del idioma japonés y especialidad en las áreas de construcción, agricultura y atención médica, entre otras, pueden solicitar residencia por hasta cinco años.