El Comité Popular municipal urgió a las ramas y niveles que fortalezcan la inspección y supervisión para evitar la situación de la quema de paja de arroz, especialmente en zonas cercanas a las carreteras y el aeropuerto internacional de Noi Bai.
Junto con las medidas estatales de gestión de las actividades de quema de paja de arroz, el Departamento de Recursos Naturales y Medio Ambiente (DRNMA) municipal compiló una lista de distritos con una alta tasa en la actividad y la envió al Comité Popular de la ciudad para su publicación en el Portal de Información de la urbe.
Por otro lado, el Servicio de Ciencia y Tecnología de Hanói, en coordinación con el DRNMA, investiga y propone tecnologías adecuadas para la recolección, el transporte y soluciones destinadas a resolver tal problema según una orientación amigable con el medio ambiente, garantizando así la salud de la comunidad.
Recientemente, en el taller "Gestión de la calidad del aire en la ciudad de Hanoi: desde compromiso a la acción", organizado por el Comité Popular municipal, en colaboración con el Banco Mundial (BM), los expertos participantes dijeron que para resolver el problema, resulta necesario tener un enfoque que cuente con la cooperación de las provincias cercanas.
El BM está dispuesto a aumentar sus compromisos en aras de apoyar a la capital vietnamita en la resolución de asuntos ambientales, a fin de construir una metrópolis verde, limpia y hermosa.
También, recomendó que Hanói debe hacer cumplir efectivamente la prohibición de quemar basura y desechos agrícolas al aire libre y tomar medidas para reducir el polvo de las calles; impulsar el transporte público y desarrollo de vehículos eléctricos, entre otros.
En particular, Hanói debe "hacer más estrictos" los estándares de emisiones para las centrales eléctricas y las industrias, aumentar la proporción de energías renovables, de acuerdo con el compromiso del Primer Ministro de Vietnam en la la 26ª Conferencia sobre el Cambio Climático de las Naciones Unidas (COP26) de alcanzar el objetivo de emisiones netas "cero" para 2050, apuntó.
En los últimos años, junto con el proceso de urbanización y ampliación de la ciudad, Hanói se ha convertido en una de las 17 urbes más grandes del mundo, por lo que, está enfrentando impactos negativos, debido a la contaminación ambiental y las consecuencias del cambio climático, afectando gravemente la calidad de vida de las personas y el desarrollo sostenible.
Mientras tanto, la falta de sincronización en la planificación del desarrollo urbano y de integración de soluciones ambientales y la comprensión limitada de las comunidades residenciales constituyen desafíos importantes para Hanoi.
Según las estadísticas, en Hanói participan siete millones 800 mil de vehículos en el tráfico, sin incluir los de otras provincias y ciudades que entran y salen constantemente de la capital.
Muchas motos son viejas y tienen piezas rotas aún en uso, emitiendo humo negro constantemente al ambiente. El polvo de los coches y las motos ha agravado aún más la situación de contaminación.