La decisión fue refrendada en una declaración conjunta de 12 puntos, que se emitió justo después de las conversaciones entre el primer ministro de Laos, Thongloun Sisoulith, y su homólogo camboyano, Samdech Techo Hun Sen, en Phnom Penh.
Los dos países coincidieron en la importancia de desarrollar aún más la amistad sobre la base del derecho internacional, y especialmente de lo establecido en las Cartas de las Naciones Unidas y de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN).
Reiteraron su confianza y respeto mutuos por los principios de no intervenir en los asuntos internos de los demás, no usar o amenazar con utilizar la fuerza, resolver las disputas pacíficamente y no permitir que ningún grupo político extranjero o fuerzas armadas usen el territorio de los países para acciones contra otras naciones.
Acordaron además mantener reuniones periódicas de alto nivel entre representantes de los dos gobiernos, ministerios y agencias, para promover la coordinación en el tratamiento de problemas o incidentes de manera oportuna y efectiva, con el objetivo de fortalecer la confianza mutua.
Las dos partes decidieron crear un comité conjunto sobre demarcación de fronteras y la ubicación de marcadores, para evaluar soluciones pacíficas respecto a temas limítrofes.
También coincidieron en la importancia de intensificar la cooperación en energía y compartieron el criterio de que el comercio en esa esfera entre Camboya, Laos y Vietnam se promovería a través de una línea de transmisión conjunta.
Consintieron en fomentar la colaboración dentro de los marcos de los mecanismos subregionales y regionales, particularmente el Triángulo de Desarrollo de Camboya-Laos-Vietnam.
Tras las conversaciones, los dos primeros ministros testimoniaron la firma de cinco acuerdos de cooperación en los campos de trabajo y energía.