Así lo afirmó el embajador de Estados Unidos en Vietnam, Marc Knapper, en una entrevista reciente concedida a la Agencia Vietnamita de Noticias (VNA).
Según el diplomático, Vietnam ha sido un buen socio del IPEF desde las etapas iniciales y, hasta la fecha, se han consolidado sustancialmente tres de los cuatro pilares que componen el IPEF (cadenas de suministro, economía limpia y equitativa), mientras se continúa trabajando en el primer pilar, centrado en el comercio.
Confió en que se podrá lograr con éxito este objetivo, especialmente teniendo en cuenta el progreso sustancial conseguido durante una reunión del IPEF en el marco de la Semana de Alto nivel del APEC 2023, en San Francisco, en noviembre.
“La idea del IPEF es abordar los desafíos que enfrentamos en el siglo XXI. Tales desafíos, como el cambio climático, la resiliencia de la cadena de suministro y la transición a energías limpias, a menudo quedan fuera del alcance de los acuerdos comerciales tradicionales o existentes”, explicó.
El objetivo de la administración Biden-Harris al lanzar el IPEF fue encontrar una manera de trabajar con socios para abordar estos problemas del siglo XXI utilizando soluciones innovadoras, precisó.
Hasta la fecha, informó, los países han logrado avances significativos en tres de los cuatro pilares. Sin embargo, aún queda trabajo por hacer en el primer pilar, que se centra en el comercio.
Las negociaciones que involucran a diferentes economías pueden ser complejas ya que cada país busca promover sus propios intereses y la prosperidad de su pueblo, dijo.
Sin embargo, expresó su confianza en que se podrá cruzar la línea de meta en los próximos meses trabajando con socios como Vietnam.
“Nuestro objetivo es establecer un marco de alta calidad que traerá beneficios a todos los países participantes, incluido Vietnam”, enfatizó.
Con respecto a las relaciones entre Vietnam y Estados Unidos, especialmente los nexos comerciales, destacó que esos lazos han avanzado significativamente después de que ambos países establecieran la “asociación integral” en 2013.
En los últimos diez años, el comercio entre Estados Unidos y Vietnam ha alcanzado la impresionante cifra de 130 mil millones de dólares. En particular, Estados Unidos deviene el mayor mercado de exportación de Vietnam, mientras que el país indochino es el octavo socio comercial más grande de Estados Unidos.
La gama de bienes intercambiados entre los dos países resulta diversa y abarca artículos como aviones, productos de alta tecnología, productos agrícolas, computadoras, teléfonos inteligentes y artículos para el hogar.
El comercio bilateral es muy vibrante y complementario. Ambos países quieren que esta relación continúe creciendo, permitiendo a los consumidores estadounidenses disfrutar de productos fabricados en Vietnam, mientras que los consumidores vietnamitas tengan acceso a bienes producidos en Estados Unidos.
Otro aspecto significativo de la relación entre Estados Unidos y Vietnam constituye la inversión realizada por ambos países en las economías del otro, indicó.
Las empresas vietnamitas muestran cada vez más interés en invertir en Estados Unidos, mientras que numerosas empresas estadounidenses, incluidas Intel y Boeing, ya han establecido una presencia en Vietnam.
Por ejemplo, Boeing se ha asociado con fabricantes vietnamitas para producir piezas de aviones. Este flujo de inversión no sólo crea oportunidades de empleo para los trabajadores estadounidenses sino que también demuestra la confianza que las empresas vietnamitas tienen en el futuro del mercado estadounidense, particularmente en el sector de alta tecnología.
Un ejemplo notable de inversión vietnamita en Estados Unidos es la inversión de cuatro mil millones de dólares de VinFast en Carolina del Norte, que tendrá un impacto sustancial.
Esta inversión no solo genera empleos para los trabajadores estadounidenses, sino que también significa la confianza de VinFast en la industria de vehículos eléctricos de Estados Unidos y la capacidad de los trabajadores estadounidenses para sobresalir en la fabricación avanzada.
Además, envía un fuerte mensaje político, destacando los vínculos cada vez más profundos entre Estados Unidos y Vietnam, que se basan en inversiones locales, establecimientos fabriles y capacitación de trabajadores.
Esto igual demuestra la confianza mutua que ambos países tienen en la calidad y las capacidades de sus respectivas fuerzas laborales, destacó.