Así lo afirmó la víspera Hoang Van Nghiem, secretario del Comité del Partido de la provincia de Son La, durante la recepción de una delegación encabezada por el embajador de Cuba en Vietnam, Rogelio Polanco Fuentes.
En un ambiente de fraternidad, Van Nghiem expuso un panorama general de la situación socioeconómica de Son La y los resultados de la cooperación entre esta provincia y sus socios internacionales, entre los que se encuentra Cuba.
También expresó su profundo agradecimiento por los sentimientos de Cuba y la valiosa ayuda que brindó a Son La durante los años difíciles, en especial el apoyo prestado a la construcción de la Granja Estatal de Moc Chau en la década de 1970.
Gracias a las vacas reproductoras y la tecnología transferida por Cuba, Moc Chau se ha convertido en la capital lechera del norte del país, la base para el desarrollo de la Sociedad Anónima de Leche Moc Chau, una marca vietnamita de gran prestigio que ha ayudado a prosperar a miles de familias.
El dirigente provincial expresó su esperanza de que la embajada de Cuba en Vietnam siga siendo un puente de conexión para impulsar la colaboración entre la isla y Son La, especialmente en los ámbitos de la agricultura de alta tecnología, la educación, la salud, la cultura y el turismo, con el fin de fortalecer la especial amistad entre los dos países.
Por su parte, Rogelio Polanco Fuentes felicitó a Son La por sus avances socioeconómicos y agradeció el afecto y apoyo sinceros que la provincia y Vietnam han dispensado a Cuba.
Asimismo, afirmó que la embajada continuará esforzándose por fomentar y desarrollar los vínculos tradicionales entre ambas naciones, así como por ampliar la cooperación entre localidades y empresas de ambos países.
En la ocasión, la delegación recorrió el centro de vacas reproductoras y la fábrica de procesamiento de leche de Moc Chau, así como varias granjas del barrio de Thao Nguyen.
El embajador cubano valoró altamente los esfuerzos del gobierno, las empresas y el pueblo de Son La en el desarrollo de la industria lechera, que asociada con la aplicación de alta tecnología, forma una cadena que vincula la producción, el procesamiento y el consumo del producto, contribuyendo a promover la economía local y a preservar por siempre la amistad “Moc Chau-Cuba”.
