El desastre tuvo lugar en la aldea de Cibenda, en la regencia de Bandung Occidental, después de que -según informes- lluvias torrenciales cayeran sobre la zona durante unas dos horas.
El regente interino de Bandung Occidental, Arsan Latif, dijo que se temía que nueve aldeanos hubieran sido enterrados vivos. A primera hora de la mañana del 25 de marzo, los rescatistas encontraron a una mujer muerta en el deslizamiento de tierra.
Latif dijo que unos 400 aldeanos tuvieron que evacuar a refugios temporales cuando decenas de casas quedaron destruidas.
En Indonesia se producen a menudo inundaciones y deslizamientos de tierra durante la temporada de lluvias, especialmente en zonas que sufren deforestación y lluvias torrenciales prolongadas.
A principios de este mes, inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra en la isla de Sumatra mataron al menos a 30 personas y muchas otras siguen desaparecidas. En diciembre del año pasado, un deslave de tierra y las riadas arrasaron con decenas de casas, destruyeron un hotel cerca del lago Toba en la isla de Sumatra y cobraron la vida de al menos dos personas.