El viceministro de Finanzas de Vietnam Nguyen Duc Chi dijo que la política de gestión de deudas incobrables del país está vinculada con la política fiscal y monetaria, centrada principalmente en la movilización de préstamos preferenciales y profesionales de acuerdo con las prácticas internacionales.
Vietnam fijó la meta de convertirse en un país con ingresos medianos altos en 2030, por lo que el acceso a los prestamos preferenciales se reducirá y al mismo tiempo surgirán riesgos de deuda, señaló, y añadió que eso requiere una gestión sincronizada y profesional para mejorar la eficiencia de la formulación política y la estructura de deuda pública adecuada con la meta trazada.
En este sentido, hizo hincapié en la necesidad de estudiar el establecimiento del modelo de Oficina de Gestión de Deuda (DMO) de varios países europeos y perfeccionar los instrumentos y mecanismos de gestión de riesgos para garantizar el espacio fiscal.
Por su parte, el representante residente del FMI, Francois Painchaud, dijo que la gestión de deuda pública de Vietnam alcanzó muchos resultados, como la proporción de la deuda sobre el Producto Interno Bruto (PIB) que se redujo de más de 60 por ciento en 2017 a más de 40 por ciento en 2021, gracias a las políticas fiscales cautelosas.
Sin embargo, según Francois Painchaud, existe inconsistencia en la toma de decisiones entre agencias relevantes, y por lo tanto resulta necesario reorganizar las instituciones y las regulaciones en la gestión de la deuda.
Según las estadísticas del Ministerio de Finanzas, la razón de deuda/PIB disminuyó desde 62,2 por ciento en 2016 a 43,1 por ciento en 2021.
La deuda gubernamental también se redujo del 51,7 por ciento del PIB en 2017 al 39,1 por ciento en 2021, que equivale a casi 144 mil millones de dólares. Mientras, la deuda local descendió del 1,1 al 0,6 por ciento del PIB en ese periodo.
Las deudas internas aumentaron significativamente al ocupar 67,2 por ciento de los préstamos pendientes del Gobierno, mientras las deudas externas tienden a reducirse.
