En un contexto marcado por la volatilidad de la economía mundial, el cambio climático y fenómenos naturales cada vez más complejos, el jefe del Gobierno destacó que el sector actuó de manera proactiva, coordinada y eficaz, alineándose estrechamente con las directrices del Partido, la Asamblea Nacional y el Gobierno, y trabajando de forma conjunta con ministerios, autoridades locales, empresas y la población.
Según el informe presentado en la cita, en 2025 el sector de Agricultura y Medio Ambiente cumplió y superó los nueve indicadores asignados por el Gobierno. El crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB sectorial) se situó entre el 3,7 por ciento y el 3,92 por ciento, mientras que las exportaciones de productos agroforestales y acuícolas alcanzaron unos 70 mil millones de dólares, superando la meta oficial de 65 mil millones.
El superávit comercial rebasó los 20 mil millones de dólares; cerca del 80 por ciento de las comunas alcanzaron los estándares de nueva ruralidad; la cobertura forestal se elevó al 42,03 por ciento; el 95 por ciento de los residuos sólidos urbanos fueron recolectados y tratados conforme a las normas, y la tasa de pobreza multidimensional se redujo entre 0,8 y 1 punto porcentual.
De cara a 2026, el Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente se propone reforzar la gestión de los recursos naturales, la protección ambiental y la capacidad de adaptación al cambio climático, así como aprovechar de manera más eficiente los recursos de tierra, agua, bosques y biodiversidad para un desarrollo agrícola sostenible y el progreso socioeconómico del país.
Al subrayar el papel estratégico de la agricultura, el primer ministro destacó que este sector ha sido un “pilar” de la economía nacional, especialmente en períodos de grandes fluctuaciones, contribuyendo de manera decisiva a la seguridad alimentaria y al control de la inflación.
En el enfoque integral del desarrollo rural, señaló, los agricultores ocupan una posición central, la agricultura actúa como motor y el campo constituye la base del desarrollo.
Reiteró que, para avanzar hacia el objetivo de convertirse en un país desarrollado de altos ingresos, Vietnam debe continuar tomando la agricultura como soporte, profundizar la industrialización y modernización, y basar el crecimiento rápido y sostenible en la ciencia y la tecnología, la innovación y la transformación digital.
En este sentido, instó al sector a acelerar la digitalización, modernización e industrialización de la agricultura, promover una agricultura ecológica y sostenible, construir zonas rurales modernas y formar una nueva generación de agricultores con mayor conocimiento, capacidad tecnológica y espíritu innovador.
El jefe del Gobierno también identificó tres grandes desafíos para el sector como los impactos del cambio climático, la adaptación a las tendencias de transición verde, digital y circular, y las limitaciones de recursos en materia institucional, de infraestructuras, capital humano, financiación y gobernanza.
Con miras a 2026, primer año de implementación de la Resolución del XIV Congreso Nacional del Partido y del Plan quinquenal de desarrollo socioeconómico 2026-2030, el primer ministro subrayó que el sector de agricultura y medio ambiente debe desempeñar un papel clave en el mantenimiento de la estabilidad macroeconómica, el control de la inflación y el impulso del crecimiento económico de dos dígitos.
El Gobierno, añadió, priorizará el perfeccionamiento institucional, la aplicación de la ciencia y la tecnología, la transformación digital, el desarrollo de infraestructuras rurales, la ampliación de mercados y la construcción de marcas de productos agrícolas vietnamitas, con el fin de fortalecer una agricultura próspera, sostenible y resiliente.