En sus palabras, Minh Chinh expresó su satisfacción ante el desarrollo fructífero de la asociación estratégica entre los dos países, al mismo tiempo, afirmó el deseo de profundizar aún más esa relación de cooperación en aras de brindar beneficios prácticos a las personas y contribuir a la paz, seguridad y estabilidad en la región.
A la vez, el dirigente filipino destacó que esta reunión es una oportunidad para fortalecer la colaboración entre ambas naciones, en particular, y la Asean, en general.
Dijo que realizará una visita a Vietnam este año para intercambiar con los líderes anfitriones orientaciones destinadas a impulsar más los nexos bilaterales.
En la ocasión, las dos partes acordaron aumentar el intercambio de delegaciones en todos los niveles, incluido el intercambio de experiencias entre los partidos gobernantes y de pueblo a pueblo.
Además, afirmaron la determinación de elevar pronto el valor del intercambio comercial bilateral a 10 mil millones de dólares a través de las medidas de crear condiciones favorables a la apertura del mercado a los productos exportados principales de cada uno, particularmente los agrícolas y alimenticios, así como intensificar la cooperación en los campos donde los dos países tienen potencial y fortalezas como la industria, alta tecnología, turismo, educación-formación, desarrollo de economía marina y lucha contra el cambio climático.
Minh Chinh afirmó que Vietnam está dispuesto a suministrar arroz de manera estratégica, a largo plazo y con precio adecuado a Filipinas, como contribución a apoyar al país a garantizar la seguridad alimentaria.
Al resaltar la buena voluntad de la nación indochina, Ferdinand Romualdez Marcos Jr. declaró que Vietnam es un socio importante de Filipinas y formuló votos porque las dos partes promuevan el papel de las empresas privadas en la colaboración económica y de inversión.
Al discutir sobre las situaciones regional e internacional, los dos dirigentes abogaron por fortalecer la coordinación y consulta mutua, brindando así aportes a consolidar la solidaridad y el papel central de la Asean.
Al compartir las preocupaciones comunes sobre los desafíos en el Mar del Este, hicieron hincapié en la importancia de resolver las disputas de conformidad con el derecho internacional y la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (Convemar) de 1982, como contribución a mantener la paz, estabilidad y seguridad de la navegación y la aviación.