Kanni Wignaraja, asistente del secretario general de la ONU y directora regional para Asia-Pacífico del Programa de la ONU para el Desarrollo (PNUD), sostuvo un diálogo con la Agencia Vietnamita de Noticias (VNA) sobre la participación de Vietnam en las acciones de esta organización y la cooperación entre la nación indochina y el PNUD.
Wignaraja evaluó positivamente el creciente papel e influencia de Vietnam en la región y en el mundo, destacando que el país ha superado el pasado bélico para avanzar hacia la paz, la estabilidad y el desarrollo sostenible.
Según ella, Vietnam se ha convertido en una nación unida donde todos tienen un lugar igualitario, dijo, añadiendo que estos valores resuenan profundamente en la ONU y el PNUD.
Expresó su confianza en que Vietnam desempeñará un papel más activo a nivel global en actividades de mantenimiento y construcción de la paz, contribuyendo al desarrollo sostenible mundial y apoyando a países menos afortunados, basado en el espíritu de solidaridad internacional.
Sobre la cooperación con el PNUD, Kanni Wignaraja recordó que este organismo ha estado presente en Vietnam desde 1978, siendo una de las primeras oficinas de la ONU en el país. Esta relación se basa en una profunda confianza, y el PNUD ha acompañado a Vietnam en los primeros pasos del proceso de Doi Moi (Renovación), desde el apoyo a los cambios institucionales hasta la mejora de la capacidad de los servicios públicos, lo que ha contribuido al desarrollo del país.
De acuerdo con la funcionaria, con el apoyo del PNUD y otros socios, Vietnam puede demostrar que el crecimiento económico no tiene por qué ir en detrimento del medio ambiente. Este será un buen modelo de desarrollo y la nación sudesteasiática se convertirá en un ejemplo para otros países.
En cuanto al progreso en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), Wignaraja enfatizó que estos no son un destino final, sino un proceso continuo. Reconoció que Vietnam ha integrado los ODS en sus planes nacionales, y declaró que el PNUD continuará apoyando a las localidades del país indochino para materializar estas metas, con la innovación y la inteligencia artificial como elementos importantes, pero siempre poniendo a las personas en el centro, con su capacidad, entusiasmo y compromiso para mejorar sus vidas y comunidades.
Respecto a las preocupaciones sobre la “trampa del ingreso medio”, la funcionaria subrayó que el éxito de Vietnam dependerá de su determinación y políticas adecuadas.
Recalcó la importancia de reformas institucionales y el uso eficiente de recursos financieros para lograr un crecimiento económico inclusivo que también mejore el bienestar social.
Además, resaltó que el desarrollo debe ser integral, no solo para las grandes ciudades, asegurando equidad en las oportunidades, sentido de pertenencia y aspiraciones compartidas entre todos los ciudadanos. Estos son factores clave para que Vietnam supere los retos y avance hacia un desarrollo sostenible.
Finalmente, confió en que, si Vietnam continúa invirtiendo en el capital humano con capacidad, aspiración, identidad y equidad, alcanzará logros sobresalientes en el futuro y desempeñará un papel cada vez más importante en la región y en el ámbito global.