Después del estallido de la pandemia de Covid-19, la compra en línea se ha convertido en un método popular y útil de los vietnamitas. El ritmo de desarrollo de comercio electrónico en este país indochino ha alcanzado un nivel impresionante.
Según el informe e-Conomy SEA 2022 de Temasek y Bain & Company, la economía digital de Vietnam registra el mayor ritmo de desarrollo en la región del Sudeste Asiático. El Valor Bruto de las Mercancías (GMV) del país aumentó un 28 por ciento, de 18 mil millones de dólares en 2021 a 23 mil millones en 2022.
Sin embargo, junto con su crecimiento drástico, el comercio electrónico también forma un canal conveniente para la falsificación.
Nguyen Thi Minh Huyen, subjefa del Departamento de Comercio electrónico y Economía digital, dependiente del Ministerio de Industria y Comercio (MIC), dijo que las infracciones en el ambiente virtual son más fáciles de cometer y más difíciles de manejar, debido a que los vendedores no tienen una tienda física, mientras que los productos se almacenan en varios lugares y los pedidos solo se aceptan en línea. Además, las páginas en las redes sociales se pueden establecer y cerrar rápidamente.
Por su parte, Nguyen Duc Le, subjefe del Departamento de Operaciones de la Dirección de Gestión del Mercado de Vietnam, dependiente del MIC, enfatizó que la comercialización de productos falsos y el contrabando, con violación de derechos de propiedad intelectual y productos de origen desconocido se vuelven cada vez más compleja, sutil y frecuente en el entorno virtual.
Las actividades de comercio electrónico se basan en la infraestructura tecnológica, por lo que durante la inspección, los infractores pueden ocultar y eliminar piezas de evidencia rápidamente, lo cual dificulta la aplicación de la ley.
Según estadísticas preliminares del MIC, cada año las autoridades reciben alrededor de mil 500 quejas a través de líneas directas y documentos escritos relacionados con las compras en línea.
Tran Huu Linh, director general de la Dirección de Gestión del Mercado de Vietnam, dijo que el año pasado, las fuerzas pertinentes al respecto en todo el país inspeccionaron 774 casos relacionados con el comercio electrónico, detectaron 439 infracciones y cobraron multas por valor total de más de 250 mil dólares. Aún así, este es todavía un número bastante modesto en comparación con la realidad, agregó.
Según Minh Huyen, para fortalecer el control sobre los productos falsificados en línea y promover el desarrollo del comercio electrónico, resultan necesarios perfeccionar el marco legal relevante y aumentar la comprensión legal pública, especialmente para comerciantes, organizaciones e individuos.
También es imprescindible aumentar la responsabilidad de las plataformas de comercio electrónico y los sitios de redes sociales en la detección y prevención de cuentas que no brindan suficiente información y reportan signos de infractores.
Además, se debe ofrecer una capacitación a empresas y propietarios de marcas protegidas, con el fin de crear un mecanismo favorable para la resolución de reclamos, verificar los productos infractores y fortalecer la coordinación entre las agencias relevantes.