Según los expertos, el país indochino debe mantener y mejorar las políticas de atracción de inversión, garantizando la transparencia, el atractivo y la competitividad.
La selección de proyectos de IED debe priorizar la calidad, la eficiencia, la tecnología y la protección del medio ambiente. Al mismo tiempo, es fundamental agilizar las reformas administrativas para apoyar a los inversores, reduciendo el tiempo de preparación e implementación de los proyectos.
Los especialistas también recomendaron dar prioridad a la atracción de proyectos de tecnología avanzada, limpia, con alto valor agregado y con una fuerte integración en las cadenas de suministro globales. Esto no solo es una necesidad urgente, sino también una estrategia clave del Gobierno para mejorar la competitividad del país.
Además, la firma continua de acuerdos de libre comercio ayudará a crear un entorno favorable para el comercio y la inversión, atrayendo más IED en sectores de producción orientados a la exportación.
A largo plazo, Vietnam está cambiando su enfoque de la atracción de IED, pasando de la cantidad a la calidad. En los últimos años, el Gobierno ha identificado la industria de semiconductores y la inteligencia artificial (IA) como sectores estratégicos.
Según Vo Xuan Hoai, subdirector del Centro Nacional de Innovación (NIC), Vietnam ha desarrollado un ecosistema de semiconductores y ha establecido un marco legal favorable para atraer empresas globales.
Actualmente, el país ha fundado asociaciones con grandes corporaciones como Cadence, Intel, Apple, Samsung y Synopsys. En particular, la colaboración con el grupo de tecnología líder mundial NVIDIA a finales de 2024 para la creación de un Centro de Investigación y Desarrollo de IA es un avance importante que abre oportunidades para que Vietnam se integre en la cadena de valor global en tecnología avanzada.
Además de atraer inversión, Vietnam tiene como objetivo capacitar a unos 50 mil profesionales en el sector de semiconductores para 2030, con el fin de satisfacer la creciente demanda de la industria.
De acuerdo con Lee Dong-Chul, director general del grupo surcoreano Hana Micron, Vietnam se está convirtiendo en un destino atractivo gracias a su dinámico entorno de inversión, el fuerte respaldo del Gobierno, su infraestructura en desarrollo y su mano de obra calificada con costos competitivos.
Mientras tanto, para evaluar con precisión el impacto de la IED, el primer ministro ha promulgado un conjunto de criterios para medir la eficiencia de la inversión extranjera, destacando 29 indicadores económicos clave, como la contribución fiscal, los beneficios antes de impuestos, la rentabilidad y el nivel de vinculación con empresas locales.
Paralelamente, el Gobierno también ha emitido el Decreto 182/2024/ND-CP sobre la creación y el uso del Fondo de Apoyo a la Inversión, lo que demuestra un fuerte compromiso con el impulso de las empresas de tecnología avanzada, especialmente en semiconductores e IA.
Según la Oficina General de Estadísticas, Vietnam atrajo el año pasado 38,23 mil millones de dólares en inversión directa extranjera, ubicándose entre los 15 países en desarrollo que más capital IED reciben.
En particular, el desembolso de inversión extranjera alcanzó los 25,35 mil millones de dólares, un aumento del 9,4 por ciento respecto a 2023, marcando el nivel más alto hasta la fecha. Gracias a esto, el sector de IED ha desempeñado un papel clave en el impulso del crecimiento económico de Vietnam, consolidando su posición como una de las economías más dinámicas de la región.
El objetivo de atraer capital de IED en el período 2021-2025 es de alrededor de entre 150 mil millones de dólares y 200 mil millones de dólares y en el período 2026-2030 es de 200 mil millones y 300 mil millones de billetes verdes.
