Durante los primeros meses de 2023, la macroeconomía vietnamita se mantuvo inmune al complicado e impredecible acontecer mundial y regional. La inflación estuvo bajo control, los grandes balances fueron garantizados, la población gozó de una buena seguridad social, mientras los ámbitos de cultura, sociedad, defensa y seguridad, construcción y rectificación del Partido, y lucha contra la corrupción y la negatividad, registraron resultados apreciables y exhaustivos.
Aun así, la economía mundial siguió retrocediendo. La demanda de consumo en los principales mercados destinatarios de bienes vietnamitas se desplomó a causa de la inflación, las tensiones geopolíticas y el endurecimiento de las políticas monetarias de los Gobiernos locales. Esto repercutió significativamente en el cumplimiento de las tareas socioeconómicas del país.
A saber, la economía nacional viene creciendo a un ritmo inferior a la meta trazada y un par de localidades incluso muestran debilitamiento frente a similares etapas anteriores. El comercio exterior y la producción de industrias punteras han menguado y existen todavía cuellos de botella en los mercados. Numerosas empresas están en apuros, algunas de las cuales recurrieron a aminorar su escala y hasta a hacer una pausa, dejando ociosos a cada vez más trabajadores.
Siguiendo al tanto de las prácticas, los diputados escucharon a los electores, se concentraron en estudiar y debatir con seriedad la situación, así como señalaron y analizaron las deficiencias.
Entre los problemas identificados, cabe mencionar el repunte modesto del Producto Interno Bruto en el primer trimestre de 2023, solo un 3,2 por ciento, pese a que la economía quedó abierta tras la pandemia de Covid-19; el retraso a la hora de desplegar el proyecto de reestructuración del sistema de organizaciones crediticias asociada con la gestión de deudas incobrables para el lapso 2021-2025, y manejar las entidades incompetentes en este sector, los proyectos de lento avance y las inversiones irrentables; y la ejecución dispareja de las Resoluciones del Parlamento entre sectores y localidades.
Los legisladores recomendaron medidas para solventar las insuficiencias, así como acordaron con el Gobierno continuar materializando decisiones cruciales, centrándose en realizar con eficacia las tareas, observando la Conclusión del nivel central referente al tema socioeconómico en 2023, las conclusiones del Buró Político del Comité Central del Partido y la Resolución de la Asamblea Nacional sobre el Plan de desarrollo socioeconómico en 2023.
Específicamente, hay que vigilar de cerca la economía doméstica e internacional para tomar el rumbo adecuado; consolidar y fortalecer la base macroeconómica, controlar la inflación, así como mejorar la capacidad endógena y la soberanía de la economía conservando un sano, estable y seguro sistema de instituciones de crédito, mercados monetarios, mercados inmobiliarios, bolsas de valores y bonos corporativos; implementar de manera drástica las medidas para solventar la lentitud de dispendio y acelerar el desembolso de las inversiones públicas, el Programa de Recuperación y Desarrollo socioeconómico y tres Programas Dirigidos Nacionales.
Paralelamente, es necesario mejorar el entorno de negocios e inversiones, simplificar los procedimientos administrativos, fortalecer la descentralización junto con la inspección, la supervisión y el enaltecimiento de la responsabilidad de los jefes, además de endurecer la disciplina en el trabajo público, sobre todo la elusión de responsabilizarse por una parte de los cuadros. Otro cometido consiste en seguir perfeccionando el sistema legal, revisar y notificar a la Asamblea Nacional las insuficiencias y superposiciones de las leyes relacionadas con las actividades de inversión, producción y negocio, y sugerir modificaciones al documento o la promulgación de uno nuevo.
En este período de sesiones, a tono con su función legislativa, el Parlamento tomó en consideración y aprobó ocho proyectos de ley y diferentes resoluciones, y aportó opiniones sobre otros documentos de importancia, con miras a proteger a la economía de las adversidades, completar el sistema legal y garantizar la seguridad social del pueblo.
Además, los dos días y medio dedicados a las interpelaciones transcurrieron en una atmósfera de responsabilidad, franqueza y democracia, con debates entusiastas de los delegados sobre los temas de interés, lo cual recibió el consenso de ciudadanos y votantes en todo el país. Mediante esta actividad se aclararon varias dudas, especialmente los desafíos que deben solventarse de manera más drástica.
Los quehaceres en 2023 y los años siguientes son sumamente arduos considerando los obstáculos acumulados. Junto con el liderazgo del Comité Central del Partido, el Buró Político y el Secretariado, y la toma de iniciativa, el dinamismo y el acompañamiento del entero sistema político, la determinación, la osadía de pensar y accionar y la disposición a dedicarse de cada empleado público y ciudadano revisten una vital importancia. Este espíritu generará una fuerza interna y una alta voluntad para que el país cumpla victoriosamente las metas y tareas establecidas.
Clausurado a más de 20 días de trabajo con un alto sentido de responsabilidad, franqueza y seriedad, el quinto período de sesiones de la XV Asamblea Nacional reafirmó la atención cercana, la resolución y la reacción oportuna del cuerpo legislativo a los temas de relevancia nacional. De ahí que sentará una base firme para motivar al país a vencer los desafíos, desarrollar la economía y garantizar la seguridad social.