La tierra central cuenta con un clima severo caracterizado por la sequía, el sol abrasador e incluso inundaciones en el periodo de lluvias, pero superando esas condiciones desventajosas, ampara a sus nativos y acoge a los visitantes con amor sincero... La gente en esta tierra, que se ve obligada a reforzarse para contrarrestar los impactos del clima, en la ocasión del Tet, se esmera aún en preparar una bandeja de forma detallista para ofrendar a los antepasados. La integridad de la bandeja dedicada al altar refleja el deseo de reunirse con los suyos y de prosperidad y paz en el Año Nuevo Lunar.
De acuerdo con la Agencia Vietnamita de Noticias, la ofrenda del Tet de la región central se prepara con mucha habilidad y detallismo. Las comidas son divididas en platos pequeños, como una forma de mostrar el esmero y también el espíritu de compartir. Platos habituales como el pollo hervido, cerdo, huevos fritos, platos sofritos, rollitos, sopa, verduras y arroz se exhiben en la bandeja... Tras rendir tributo a los antepasados y apagar el incienso, la gente baja la bandeja del altar y se reúne en un ambiente familiar.
Si el norte se destaca con el Banh Chung (pastel de arroz glutinoso cuadrado), el Banh Tet (pastel de arroz glutinoso cilindro) es un plato tradicional en el Tet de la gente en la región central. El pastel tiene forma cilíndrica y está envuelto en hojas con la masa hecha de arroz glutinoso, judías verdes, carne de cerdo y se hierve y luego se corta en círculos. Con el transcurso del tiempo, las personas de cada región variaron el Banh Tet. La parte salada puede contener carne de cordero o chivo, la parte vegetariana puede incluir gac (un tipo de melón perenne), plátano, o frijol negro... todos se combinan y crean un sabor muy rico y único.
En los platos salados de la región central, muchas personas otorgan gran importancia a la “reserva”. Además del Banh Chung, el Banh Tet se puede conservar hasta un mes y los platos que lo acompañan se pueden conservar, igualmente, por largo tiempo. Los escabeches resultan ya muy familiares para los pobladores en el centro, con papaya, rábano blanco y/o zanahorias, secados y luego empapados con salsa de pescado, o la típica pasta de gambas agrias de Hue, que se conserva durante mucho tiempo pero aún es crujiente y delicioso.
La bandeja de Tet en la región central cuenta además con otros platos principales, como carne de res, cerdo, jamón de carne de res, entre otros... El tipo de vino en el altar es también una especialidad de cada región, como el vino Hong Dado con origen en Quang Nam y Quang Ngai, el famoso vino Bau Da en Binh Dinh o el vino Minh Mang de la ciudadela imperial de Hue... Todos conforman un plato, el Tet está lleno de sabor e imbuido de la identidad cultural del país.