El juicio simulado se centró en el delito de violar las regulaciones sobre la protección de la fauna silvestre en peligro de extinción, valiosa y rara, según el Artículo 244 del Código Penal.
Según el escenario, los días 27 y 28 de marzo de 2025, el capitán del barco pesquero Le Van T y siete tripulantes utilizaron redes de enmalle en el mar y capturaron 15 tortugas carey, de las cuales 12 estaban muertas. Van T ordenó a la tripulación extraer los órganos de las tortugas muertas y almacenarlos en hielo para llevarlos a tierra y venderlos. Posteriormente, el barco fue inspeccionado en el puerto pesquero V, donde las autoridades encontraron los restos de las 12 tortugas.
Las evaluaciones de los expertos confirmaron que los animales eran tortugas carey, una especie en peligro crítico de extinción. El tribunal sentenció a Van T a 10 años de prisión.
La propietaria del barco, Nguyen Thi H, no fue procesada, ya que desconocía el transporte ilegal. Los siete pescadores contratados huyeron durante la inspección y aún están siendo identificados por las autoridades.
Los pescadores locales que asistieron al evento coincidieron con el veredicto, señalando que sirve como advertencia para cumplir con las leyes de protección de los recursos marinos y evitar prácticas de pesca ilegal.
El juicio simulado tuvo como objetivo mejorar la conciencia legal entre la comunidad local, fomentar una pesca responsable y contribuir a los esfuerzos de Vietnam para combatir la pesca INDNR, lograr que se levante la “tarjeta amarilla” impuesta por la Comisión Europea sobre el sector pesquero nacional y desarrollar de manera sostenible esta industria.