La iniciativa tiene como objetivo ayudar a llevar a cabo soluciones urgentes para combatir esos fenómenos climáticos extremos, como bombear agua, dragar canales, mantener obras de riego, construir terraplenes temporales para retener agua dulce, cavar estanques y pozos, y extender la red de tuberías de agua.
De acuerdo con la Agencia Vietnamita de Noticias, el presupuesto se destina también a la compra de equipos para purificación y almacenamiento de agua, y entrega de agua a áreas residenciales, hospitales y escuelas que enfrentan escasez del líquido vital.
Debido a la falta de lluvia en 2019, la mayoría de los embalses de riego en todo el país tienen solo entre 50 y 80 por ciento de capacidad. El embalse en la cuenca arriba del río Hong en Thai Binh está lleno en un 60 por ciento, mientras que el lago Hoa Binh está en un 63 por ciento, el más bajo en los últimos 30 años.
Los que están en la región central están llenos solo entre un 15 y un 30 por ciento. El nivel del agua en el río Mekong es más bajo que en 2015-2016, que registró la peor salinidad.
Según el MARD, se ha demostrado que las soluciones para prevenir la sequía y la intrusión de agua salada son efectivas. Aunque la región del Delta del Mekong sufrió una salinidad más severa que en 2015-2016, solo 49 mil 800 hectáreas de cultivos de arroz en 2019-2020 sufrieron daños, lo que representa el 1,81 por ciento de toda la región. En el pico, alrededor de 96 mil hogares carecían de agua limpia, en comparación con 114 mil hogares en 2015-2016.
Todos los cultivos de arroz en la región de las tierras altas centrales y la región norte reciben agua de los embalses de riego con una capacidad combinada de 2,68 mil millones de metros cúbicos.
Se pronostica que la sequía y la escasez de agua continuarán hasta mayo en las tierras altas centrales y agosto en la región central.
Anteriormente, el primer ministro Nguyen Xuan Phuc aprobó un paquete de ayuda de más de 22,7 millones de dólares para ayudar a ocho provincias en el Delta del Mekong -centro de producción agrícola del país-, a lidiar con la sequía y la intrusión de agua salada.