Numerosas flores y plantas ornamentales como la orquídea polilla, la flor de melocotón y la toronja empiezan a inundar en muchas calles de Hanói.
Los vietnamitas suelen comprar flores y plantas ornamentales para decorar sus casas, así como disfrutar de un gran ambiente y pasar tiempo junto con familiares y amigos durante el Tet.
La flor de albaricoque es icónica de la mayor festividad de los vietnamitas y, según la creencia, representa la prosperidad y la buena suerte para las familias.
El árbol de la flor de albaricoque que se vende aquí tiene de tres a más de 10 años de edad.
Además de la flor de albaricoque, la orquídea polilla también es una opción escogida por muchas personas en ocasión del Tet.
La toronja es la fruta favorita para decorar el altar y sirve de ofrendas para los antepasados.