A primera vista, estos productos no son diferentes de los ladrillos ordinarios. Pero resultan muy especiales, porque están hechos de residuos plásticos.
La mayoría de la materia prima para la fabricación de estos bloques es el poliestireno extraído de los residuos de cajas de espuma y vasos de plástico, los cuales se utilizan a menudo en Vietnam.
Dang Minh Tuan, miembro del equipo de investigación, compartió que tras investigar muchos artículos sobre el reciclaje de desechos plásticos, al grupo le surgió la idea de usar esos desperdicios para fabricar estos ladrillos.
El ladrillo hecho de plástico es un producto del proyecto creativo Octoplastic de un grupo de estudiantes de la Facultad de Ingeniería Química de la Universidad Politécnica de Ciudad Ho Chi Minh.
Debido a que los desechos plásticos constituyen una cuestión ambiental de Vietnam, los jóvenes del país indochino han investigado la conversión de ese tipo de basura en objetos útiles.
En tanto, Lac Dan Hy, jefe del equipo de investigación, destacó que el poliestireno es un plástico no reciclable, por lo que deseamos que en lugar de tirarlos, quemarlos, o enterrarlos, los pobladores puedan procesarlos para contribuir a la protección del medioambiente.
Los ladrillos sin quemar se producen a través de tres etapas principales, en las cuales las cajas de poliestireno y vasos de plástico se cortan y muelen en pequeñas partículas de plástico.
Tras mezclar cemento y agua con esos polvos se crea una mezcla de aglutinante, que se coloca en moldes y se seca durante 24 horas.
Los expertos apreciaron la practicidad y capacidad del despliegue amplio del proyecto Octoplastic.
Estos ladrillos plásticos han sido probados y evaluados con características ligeras, altas propiedades mecánicas, capacidad de carga, aislamiento acústico y térmico.
Le Thi Kim Phung, director del Centro de Tecnología de Refinación Petroquímica de la Universidad Politécnica de Ciudad Ho Chi Minh, subrayó que las empresas pueden invertir en el proyecto para llevar los ladrillos plásticos al mercado y aseveró, además, que el equipo de investigación también está dispuesto a apoyar a las localidades en este campo.
Vietnam dispone cada año de casi dos millones de toneladas de desechos plásticos, pero menos del 30 por ciento se recicla.
Según la Agencia Vietnamita de Noticas, con esta iniciativa, los investigadores jóvenes vietnamitas ganaron el premio del concurso “Buscar ideas creativas para un océano sin plástico” organizado por la Unesco.