El programa tiene como objetivo movilizar la fuerza del sistema político y de toda la población en la lucha antidrogas, con el propósito de implementar sincrónicamente soluciones en la reducción de la oferta, la demanda y los daños de los narcóticos.
El programa se implementará hasta 2030, con el fin de construir una sociedad segura, saludable y sostenible.
El contenido del programa incluye mecanismos de política específicos, que requieren que el Gobierno desarrolle planes detallados y fases de inversión, así como que fortalezca la cooperación internacional.
La Asamblea Nacional exige que el Gobierno y las autoridades implementen y completen seriamente los objetivos establecidos, especialmente la mejora de las instalaciones de rehabilitación y desintoxicación.
La resolución también enfatiza en la importancia del control y la inspección durante la implementación del programa.