Por estos parajes, el progreso es una maravillosa oda a la voluntad, a la aspiración de vencer los retos y avanzar en la vida, y a la valentía de los isleños.
Bajo las rigurosas condiciones imperantes en Truong Sa, no solo la gente, sino también las plantas “Phong ba” (Heliotropium foertherianum) y “Bao tap” (Scaevola taccada) -curiosamente, ambos nombres son sinónimos de “tormenta”- irradian vitalidad. Ellas suelen utilizarse para describir el espíritu indomable de los marinos que velan por el archipiélago.
La bella y tranquila vida en Truong Sa se percibe también con hermosas flores brotando al lado de las trincheras, el sonido de la campana en alguna pagoda local, el susurro de las olas y el canto de las palomas.
Un joven soldado cuida la flor de una cactácea. |
Un “amigo” de los oficiales en Truong Sa. |
Una pagoda en Truong Sa. |