La medida tiene como objetivo mejorar la eficacia de la gestión de las políticas monetaria, de tipos de interés y crediticia, fortalecer la administración estatal sobre el sector monetario y las actividades bancarias para promover el crecimiento económico, cumplir y superar todos los principales criterios de desarrollo socioeconómico en este año y crear un impulso para los planes en 2025 y el período quinquenal 2021-2025.
El dirigente exhortó al BEV a coordinar con las agencias relevantes para continuar monitoreando de cerca los acontecimientos internacionales y regionales para dar evaluaciones, pronósticos y respuestas oportunas y efectivas; operar la política monetaria de manera proactiva, flexible, oportuna y eficiente, en estrecha coordinación y armonía con la política fiscal expansiva y otras macroeconómicas.
Urgió a garantizar la prioridad de promover el crecimiento asociado con la estabilidad macroeconómica, controlar la inflación y asegurar los equilibrios importantes, en un esfuerzo por que el crecimiento económico alcance el 8 por ciento o más para 2025, con miras hacia una cifra de dos dígitos en el lapso 2026 - 2030.
Al mismo tiempo, el BEV debe centrarse en implementar tareas y soluciones más drásticas y efectivas en materia de gestión de las tasas de interés, tipos de cambio, crecimiento del crédito, reducción de las tasas de interés de los préstamos, a la par de controlar estrictamente las tasas de interés de los depósitos de los bancos comerciales, para satisfacer las necesidades de capital de la economía a finales de 2024, el Año Nuevo Lunar y los primeros meses de 2025, subrayó.
El BEV necesita, además, orientar a las instituciones crediticias que centren el crédito en sectores de producción y negocios, áreas prioritarias, motores de crecimiento económico tradicionales como la inversión, el consumo y las exportaciones, así como los nuevos como la transformación digital, la transición verde, la respuesta al cambio climático, la economía circular y colaborativa, la ciencia, la tecnología y la innovación. Debe controlar estrictamente el crédito para los renglones de riesgo, garantizando que las actividades crediticias operen de manera segura y efectiva, reducir los costes y aumentar la aplicación de las tecnologías y la transformación digital, para tener un margen para rebajar los tipos de interés de los préstamos.
El premier instó al BEV, el Ministerio de Seguridad Pública, la Inspección del Gobierno y las agencias funcionales a seguir de cerca las actividades de las organizaciones crediticias y manejar estrictamente los casos de violación.