El diputado Nguyen Quang Huan, de la sureña provincia de Binh Duong, señaló que para el año 2025, se espera que el Producto Interno Bruto (PIB) de Vietnam sea de unos 500 mil millones de dólares.
Detalló que si la tasa de crecimiento sigue manteniéndose en el siete por ciento anual, para el año 2035 el PIB alcanzará un billón de dólares y para el 2045 será de dos billones de dólares para convertirse en un país de ingresos altos.
Quang Huan manifestó la necesidad de prestar atención en la sostenibilidad porque todavía la economía del país depende mucho de la motivación de la inversión extranjera directa (IED).
Al puntualizar que si bien las empresas de IED tienen un gran superávit comercial, el diputado subrayó que las nacionales tienen déficit. En tal sentido, recalcó la importancia de los recursos internos para el desarrollo sostenible.
En su discurso, el legislador Hoang Van Cuong, de Hanói, afirmó que la inversión pública ha creado un gran avance para el desarrollo, pero aún no se ha prestado el debido interés a la inversión en recursos humanos de alta calidad en las áreas de educación y salud.
Ante esta realidad, Van Cuong propuso que es necesario aumentar la proporción de la asignación de capital de inversión para el desarrollo del presupuesto estatal a estos dos sectores, al menos para tener suficiente inversión para construir infraestructuras originales.
Mientras tanto, el representante de la provincia central de Quang Tri, Ha Sy Dong, mostró su preocupación sobre la gestión y la distribución de los fondos financieros estatales no presupuestarios, refiriéndose a la calidad del uso del capital y su preservación y rentabilidad.
Además, llamó la atención sobre las complejidades que rodean la gestión de los saldos de depósitos del Tesoro del Estado. A pesar de los esfuerzos constantes del Ministerio de Finanzas desde 2017 para transferir fondos excedentes de los bancos comerciales al Banco Estatal, el proceso ha estado plagado de inconsistencias en cuanto a los plazos, el volumen, la duración y las tasas de interés en las subastas de depósitos de los bancos comerciales.
Al considerar que la gestión eficiente del Tesoro del Estado es crucial para una política monetaria eficaz, instó a la AN y al Gobierno a revisar las regulaciones y eliminar rápidamente los cuellos de botella existentes.