Así se indicó en un acuerdo sobre la cofinanciación de terceros firmado entre el Departamento de Asuntos Exteriores y Comercio del país oceánico y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en Vietnam, notificó hoy este último organismo.
En la ocasión, la embajadora australiana, Robyn Mudie, reafirmó el vigoroso apoyo de su país a Vietnam en el impulso de la gobernanza y la administración pública a nivel provincial, especialmente en medio del brote del Covid-19.
Mostró su impresión ante la constante renovación del PAPI, es decir, la aplicación de más indicadores para medir la eficiencia del gobierno electrónico y la gestión del medioambiente, la cual es adecuada para los nuevos requisitos en el país.
Mientras, la representante residente del PNUD en Vietnam, Caitlin Wiesen, destacó que el considerable aporte de Australia viene en el preciso momento en que el país indochino entra en la fase de recuperación pospandemia.
Prometió que el PNUD se coordinará con los socios pertinentes para ayudar a las provincias y ciudades vietnamitas a mejorar la efectividad de la gobernanza pública.
El PAPI nació en 2009 como resultado de la colaboración entre el PNUD y algunas instituciones investigadoras vietnamitas. Australia es el patrocinador principal para esta iniciativa desde 2018.
Desde su lanzamiento hasta el momento, el proyecto ha recogido opiniones de 131 mil 501 habitantes, de los cuales las mujeres ocupan un 52 por ciento, un 16 por ciento de ellas son de etnias minoritarias. Cada una de las 63 ciudades y provincias en Vietnam se han unido para trabajar por elevar su índice PAPI.
Además, el PAPI ha contribuido a suministrar datos para evaluar la eficacia del despliegue de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas.
