Todos los muebles se han realizado a partir de productos desechados, desde llantas, botellas y sofás viejos, hasta de algunas herramientas agrícolas.
Las botellas grandes de plástico se convirtieron en llamativas luces decorativas.
Una hermosa lámpara de araña diseñada y montada a partir de viejas botellas de vidrio.
Más de mil botellas de plástico decoradas con gouache y acuarelas.
El pasamano está hecho de llantas de motos.
La cafetería se encuentra en un edificio de cuatro pisos, cada uno tiene un diseño diferente.
Los visitantes extranjeros se sorprenden con las luces hechas y diseñadas de botellas de plástico y ruedas de trilladora.
Las libélulas están elaboradas con botellas de plástico.
Las viejas bicicletas y motos se aprovechan para decorar la cafetería.
Frescos pintados con las imágenes más familiares de Hanói y la vida cotidiana de los capitalinos.