El encuentro, jugado en el Estadio Nacional de My Dinh en la capital vietnamita de Hanói, comenzó cuando la lluvia acaba de terminar. Vietnam, de rojo, ejecutó el saque inicial. Tailandia se vistió de amarillo.
Los discípulos del entrenador Park Hang Seo tuvieron numerosas oportunidades para conseguir el gol, pero las desaprovecharon. Por su parte, a pesar de sufrir presión, los tailandeses siguieron desplegando su estilo de juego, basado en pases cortos. Ben Davis fue la inspiración de los ataques del equipo siamés. La lucha en el medio campo fue intensa.
La primera mitad del partido terminó sin goles, pese a los intentos de ambos equipos de adelantarse en el marcador.
En el tiempo complementario, Tailandia cambió de táctica, probando la suerte con los tiros a larga distancia. Mientras tanto, Vietnam aprovechó los rápidos contraataques.
En el minuto 83 de partido, el pase de Phan Tuan Tai buscó la cabeza de Manh Dung. Este realizó un cabezazo, enviando el balón a una posición demasiado incómoda dentro de la portería, sin permitir ningún chance al portero tailandés. ¡1-0 para Sub-23 de Vietnam!
En los últimos minutos del partido, Tailandia lanzó infecundos ataques para encontrar el empate.
Después de cuatro minutos extra, el sonido del silbato final hizo estallar todo el estadio. Los aficionados vietnamitas no pudieron contener la alegría por la victoria histórica del equipo sub-23.
Con esta victoria, U23 Vietnam también mantiene una racha de 11 hojas limpias seguidas en torneos oficiales, un récord en el sudeste asiático.
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(Foto: Thanh Dat)
