En la reunión efectuada la víspera en el marco de las 40a y 41a cumbres de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean), Minh Chinh reiteró también el compromiso de su país de implementar los acuerdos logrados durante la visita oficial a Vietnam en octubre pasado de Antonio Guterres.
En la ocasión, ambas partes coincidieron en que 2023 seguirá siendo un año difícil para el mundo, con numerosos problemas macroeconómicos como el aumento de la inflación y de las tasas de cambio y de interés por parte de los bancos centrales de distintas grandes potencias, lo que afectará negativamente las economías de países en vías de desarrollo.
Se refirieron, además, a las crisis energética y alimentaria, las cuales, señalaron, requerirán coordinación entre todos los países, especialmente entre las potencias mundiales.
Abogaron por que los países en vías de desarrollo realicen mayores esfuerzos para prevenir choques externos y mejorar la resiliencia, en especial en términos de seguridad financiera, energética y alimentaria.
Por su parte, Guterres expresó su satisfacción por las contribuciones de Vietnam a las labores de la ONU y destacó los esfuerzos del país indochino por impulsar la recuperación económica en el período posCovid-19, a la par de manifestar su certidumbre sobre el futuro brillante de la nación con un gran potencial.