En las cartas, Van Chien expresó su profundo pesar por la noticia del fallecimiento del Papa Francisco, calificándolo de una profunda pérdida para la Iglesia Católica, la Conferencia Episcopal de Vietnam y, en particular, para la comunidad católica vietnamita.
El Papa Francisco fue elogiado como un líder religioso ejemplar que encarnó la compasión y la humildad, y que promovió incansablemente la paz, la justicia, la unidad y la reconciliación entre las naciones. Ofreció mensajes de aliento a la Conferencia Episcopal y a los fieles católicos de Vietnam, animándolos a mantener una estrecha conexión con la nación y a contribuir activamente a la construcción de una sociedad justa, compasiva y unida.
Van Chien también señaló que, bajo la guía pastoral del Papa Francisco, las relaciones entre la Santa Sede y el Estado de Vietnam se habían fortalecido constantemente, basadas en el espíritu de diálogo, comprensión y respeto mutuos, sentando las bases para una nueva etapa de cooperación.
El Presídium del Comité Central de la VFF expresó su confianza en que, inspirados por el legado de bondad, humildad e incansables esfuerzos por la paz del Papa Francisco, la Conferencia Episcopal de Vietnam y el Comité para la Solidaridad de los Católicos Vietnamitas continuarían guiando a los fieles para que siguieran las enseñanzas del Papa de unidad y servicio.
Expresó su deseo de que hagan contribuciones significativas a la vida comunitaria y al desarrollo social, manteniendo un estrecho compromiso con la nación en la construcción de un Vietnam próspero, civilizado y feliz.