En concreto, las organizaciones sindicales de las provincias y ciudades y también en las empresas necesitan coordinarse con los centros de transfusión sanguínea y el Comité Directivo de la campaña para divulgar y movilizar a los trabajadores a realizar este gesto noble.
Se espera que en febrero y marzo, el programa atraiga la participación del 20 al 30 por ciento de los empleados de los sindicatos a nivel de base para contribuir a resolver la falta de plasma, ayudando así a salvar la vida de miles de pacientes.
Al mismo tiempo, esas entidades deben centrarse en garantizar la seguridad y la conveniencia, así como elegir un lugar espacioso, aireado, limpio y que tenga áreas para lavarse las manos, además de difundir y guiar a los pobladores en la prevención y el control de la epidemia.