Al intervenir en el simposio, Phi Vinh Tuong, jefe interino del Instituto de Economía y Política Mundial, Academia de Ciencias Sociales de Vietnam, informó que desde el estallido de la pandemia del Covid-19 hasta la fecha, su país ha hecho esfuerzos para responder a la crisis sanitaria, mayor problema de seguridad no convencional en las últimas décadas, con el objetivo de superar todos los efectos negativos de la epidemia.
Sin embargo, después de ese mal, el mundo siguió presenciando conflictos armados en diferentes regiones del mundo, lo cual puso al orbe a resolver los desafíos de seguridad no convencionales como el energético, el alimentario y el marítimo, entre otros, señaló.
Phi Vinh Tuong enfatizó el enorme impacto que los desafíos traen a la economía, la política y la sociedad de los países, las regiones y el mundo entero.
Al mismo tiempo, reiteró que resulta necesario identificar los impactos de esos desafíos, especialmente los directos con Vietnam, para ayudar a los gerentes a encontrar soluciones destinadas a responder a los retos en el proceso de conseguir los objetivos de desarrollo del estado sudesteasiático.
A la vez, al evaluar la inestabilidad económica global que afecta al país, Pham Anh Tuan, subjefe del Instituto de Economía de Vietnam, dijo que la inestabilidad económica global debe incluir primero la recesión económica, los conflictos geopolíticos globales, la política monetaria estricta, la alta inflación y la inestabilidad financiera.
Se espera que la economía vietnamita demuestre signos positivos en la segunda mitad de 2024, porque las empresas nacionales han comenzado a recuperar los pedidos de exportación, expresó.
En la ocasión, los asistentes se centraron en el análisis y la evaluación de una serie de cuestiones importantes, sobre todo formas de respuesta y resolución para implementar exitosamente los objetivos de desarrollo del país al 2030 y con visión al 2045.