Las autoridades de esta provincia sureña entregaron obsequios a los dignatarios religiosos de la Asociación para la Solidaridad de Monjes Budistas Patrióticos (ASMBP), así como a la comunidad de maestros de la escuela Pali.
Al intervenir la víspera en el encuentro, Huynh Thi So Ma Ly, representante del Comité para Asuntos de Etnias Minoritarias, elogió la unidad y los esfuerzos de la comunidad de seguidores budistas y khmeres en la construcción y desarrollo local.
Por su parte, los directivos de la ASMBP y de la escuela Pali afirmaron que las políticas de asistencia del Gobierno impulsan el rápido ritmo de crecimiento y la integridad de la vida económica y sociocultural de este grupo étnico.
El nivel intelectual de los pobladores se elevó mientras que la tasa de pobreza se reduce rápidamente, señalaron, así como reiteraron su confianza en el Gobierno y el Partido, además del compromiso de esforzarse junto con las autoridades locales para divulgar y cumplir con las políticas gubernamentales.
En el festejo, las autoridades de Soc Trang también entregarán otros regalos a las personas y familias destacadas de la comunidad de Khmer.
También se efectuó una actividad por esta ocasión en la provincia de Tra Vinh, que cuenta con más de un millón de habitantes, de los que el 32 por ciento son khmeres.
De acuerdo con Ha Thanh Son, subjefe del Comité para Asuntos de Etnias Minoritarias de Tra Vinh, las autoridades locales destinaron fondos millonarios para la construcción de infraestructuras en las localidades pobres, donde reside en su mayoría la comunidad de esa etnia.
El año pasado la provincia registró más de 16 mil 400 familias pobres, lo que representa una reducción interanual del 2,46 por ciento.
El Festival Sene Dolta, que se celebra anualmente durante tres días del 29 de agosto al primero de septiembre según el calendario lunar, se prolongará desde este viernes hasta el domingo.
Constituye una fiesta para que los miembros de esa comunidad étnica realicen rituales a los ancestros, además de disfrutar de canciones y bailes tradicionales después de un año de duro trabajo.
Según las tradiciones, las familias limpian en el primer día del festejo sus casas, visitan las pagodas en la segunda jornada para orar por la felicidad y rinden tributo en su vivienda a sus ancestros en el último día.