Según Abdul Malik, jefe de la Agencia de Búsqueda y Rescate de Padang, nueve de las 10 víctimas desaparecidas fueron encontradas muertas ese mismo día por la tarde.
El monte Marapi, en la isla de Sumatra, arrojó al cielo una torre de cenizas de tres mil metros de altura, más alta que el propio volcán, el 3 de diciembre.
Algunos de los 75 excursionistas que recorrieron la montaña durante la erupción fueron encontrados vivos y arrastrados hacia abajo, con múltiples quemaduras y fracturas.
La operación de búsqueda y rescate enfrentó dificultades debido a la continua actividad volcánica y al mal tiempo. Según el puesto de seguimiento de Marapi, se observaron cinco erupciones desde la medianoche hasta las 8:00 horas, del 5 de diciembre.
El volcán de dos mil 891 metros de altura, que actualmente se encuentra en el segundo nivel de alerta de la escala de cuatro niveles de alerta de Indonesia, figura entre los volcanes más activos de la isla de Sumatra.
Indonesia se encuentra en el Anillo de Fuego del Pacífico, donde el encuentro de las placas continentales provoca una alta actividad volcánica y sísmica. Actualmente este país cuenta con cerca de 130 volcanes activos.