Mong, aldea de aguas termales en el norte de Vietnam

La aldea de Mong, en la provincia vietnamita de Son La, atrae a turistas con una belleza típica del noroeste del país, contemplada a través de paisajes pintorescos y montes ondulantes reflejados en el bonito río Nam La. Además de los amantes de la naturaleza, es un destino ideal para quienes deseen conocer la cultura del grupo étnico Thai.

La aldea de Mong es un destino atractivo en Son La. (Fotografía: baodantoc.vn)
La aldea de Mong es un destino atractivo en Son La. (Fotografía: baodantoc.vn)

La aldea se ubica en la comuna de Hua La, pueblo de Son La. Lo primero que llama atención a cualquier viajero son los espectaculares paisajes naturales. Montañas aparte, verá colinas exuberantes de café, árboles de albaricoque, ciruelos y bambú.

En primavera, las flores de albaricoque, ciruelo y ‘ban’ (Bauhinia variegata) cubren de blanco los bosques y la atmósfera se torna bulliciosa con el zumbido de enjambres de abejas en busca de néctar. El frío leve en ese momento también es ideal para bañarse en las aguas termales.

La tranquilidad en el lugar.

La belleza sosegada del sitio recibió en los últimos años inversiones para ser el foco de un complejo de ecoturismo. Al cruzar el portón de bienvenida que indica ‘Aldea de Mong’, el visitante experimentará la vida en medio de montañas grandiosas, palafitos y arrozales en terrazas.

La aldea posee, además, la terma natural de Bo Nam Un, situada a cinco kilómetros al suroeste del centro de la ciudad de Son La, cabecera de la provincia. Esa corriente no solo tiene temperaturas fluctuantes dependiendo de la estación, sino también componentes minerales de uso terapéutico, como el tratamiento de enfermedades de la piel o la artralgia.

El baño termal es una de las experiencias más interesantes en esa tierra.

La temperatura de las aguas allí siempre está entre 36 y 38 grados centígrados y son inodoras. En cualquier temporada el baño es agradable, con el añadido de la tranquilidad y el aire fresco del lugar.

Los turistas también tienen oportunidad de conocer las tradiciones culturales de larga data de la etnia Thai. En Mong viven más de cien familias de este grupo, que se dedican principalmente al cultivo del arroz acuático, la ganadería y el tejido de brocado. A lo largo de los siglos los valores culturales de los Thai se conservan intactos, lo cual se refleja en el atuendo, las joyas, la gastronomía, las festividades y los cantos folclóricos.

Los turistas también tienen oportunidad de degustar la gastronomía de los Thai radicados en la localidad.

Luego de un buen baño termal y lecciones sobre la cultura autóctona, los viajeros son invitados a probar platos sabrosos preparados por las mujeres Thai, como pollo y pescado asados, arroz cocido en tubos de bambú (‘com lam’ en vietnamita) y verduras silvestres.

Casi todas esas delicias locales se sirven sobre una bandeja de bambú y la salsa para mojar ‘cham cheo’, hecha con sal tostada, chile asado, pipas de frutos de la especie Zanthoxylum rhetsa - un condimento esencial en la comida local, ajo y hierbas aromáticas molidas. Degustar el licor a sorbos arranca elogios hasta de los comensales más selectivos.