Reunión anual del FMI y el BM: Persiste el lento crecimiento mundial

El Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) pidieron un mayor esfuerzo por parte de los países, especialmente las potencias mundiales, en trazar políticas drásticas con el fin de rebajar las tensiones comerciales y fortalecer la cooperación multilateral, así como ofrecer un apoyo oportuno a la actividad económica global, y resolver los asuntos de corto y medio plazo que amenazan el crecimiento económico.

Reunión anual del FMI y el BM: Persiste el lento crecimiento mundial

Tal opinión fue dada a conocer durante la reunión anual de esos dos organismos financieros más grandes del mundo recién concluida en Washington, capital de Estados Unidos.

En el evento, los líderes del FMI y el BM llamaron a los 189 países miembros a resolver los "cuellos de botella", o sea, los conflictos comerciales crecientes y otros asuntos, los cuales advirtieron que amenazan y dificultan el crecimiento económico global.

Mientras, los especialistas coincidieron en que la economía mundial, cuyo crecimiento ha ralentizado por el impacto de las tensiones comerciales, está enfrentando varios desafíos y problemas que deben resolverse rápidamente.

La directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, señaló que la guerra comercial entre China y Estados Unidos constituye uno de los impactos negativos a la economía mundial. Además, subrayó la extensión de la desaceleración económica en Europa asociada con la salida del Reino Unido de la Unión Europea (Brexit) y los conflictos en Oriente Medio.

Georgieva indicó que las tensiones comerciales están dañando la confianza de las empresas y los inversores, y que un 90 por ciento de la economía global registró un crecimiento débil.

Pese a los acuerdos comerciales alcanzados por Estados Unidos y China, afirmó que si ambos países no resuelven completamente sus disputas, el crecimiento estable de la economía mundial no logrará señales positivas.

El FMI pronosticó que el impacto integral de las disputas entre esas dos potencias reducirá el crecimiento económico del planeta en un 0,8 por ciento.

En este contexto, el organismo ajustó por cuarta vez su predicción del crecimiento de la economía global en 2019 al tres por ciento, menor del 3,7 por ciento esperado de acuerdo con el informe publicado en julio pasado.

Asimismo, el FMI estimó la reducción del Producto Bruto Interno (PIB) de Estados Unidos, China y la Unión Europea del 2,6; el 6,2 y el 1,3 por ciento al 2,4; el 6,1 y el 1,2 por ciento, respectivamente.

La economista del FMI, Gita Gopinath, opinó que la economía global se encuentra en el momento de mayor recesión desde la crisis financiera de 2008, y que el mundo está entrando en un período de desaceleración con una recuperación y perspectiva inciertas.

Al asistir a este gran evento, los ministros de finanzas y los gobernadores de los bancos centrales del Grupo de los 20 (G20) también expresaron su preocupación porlel decrecimiento económico mundial, pero pronosticaron un crecimiento significativo el próximo año si los riesgos no aumentan.

El ministro de Finanzas de Japón, Taro Aso, manifestó la confianza de que la economía mundial crecerá pero con un ritmo débil, y afirmó que los riesgos incluyen la escalada de las tensiones comerciales y geopolíticas.

El FMI proyecta un crecimiento mundial del 3,4% para el año próximo, basado en las perspectivas optimistas en los mercados emergentes en América Latina, Oriente Medio y Europa.

El presidente del BM, David Malpass, comentó que se puede lograr un crecimiento de base amplia en 2020, gracias a una perspectiva positiva en el aumento del consumo y el salario laboral en las economías recién emergentes y en desarrollo, donde las reformas establecidas pueden traer resultados significativos.

Sin embargo, el FMI y el BM reiteraron una vez más que no será fácil cumplir dichas tareas, porque se requieren grandes esfuerzos por parte de todos los países, especialmente en un contexto en que la cooperación global y multilateral se ve obstaculizada por los conflictos comerciales.