Subida de precios de petróleo mantiene su impulso

El precio del petróleo West Texas Intermediate (WTI) y del Brent ha aumentado al nivel más alto en los últimos siete años. Se prevé que la fuerte subida del precio continúe en 2022, impulsado por el optimismo sobre la demanda creciente de petróleo y las preocupaciones decrecientes sobre la variante Ómicron, así como la disminución de las tensiones geopolíticas.

Un camión transporta petróleo crudo a una refinería en Estados Unidos. (Fotografía: VNA)
Un camión transporta petróleo crudo a una refinería en Estados Unidos. (Fotografía: VNA)

Actualmente el precio del WTI en Asia alcanzó 85,66 dólares por barril y el del Brent 88 dólares por barril, el más alto desde octubre de 2014. El aumento del 10 por ciento de los dos tipos de petróleo a partir del principio de 2022 proviene de las afirmaciones de los expertos sobre la demanda creciente en el contexto de la nueva normalidad y la reapertura de los países tras la pandemia.

Además, el ataque de los rebeldes hutíes en Yemen a una refinería de petróleo en los Emiratos Árabes Unidos (EAU) el 17 de enero también incidió sobre el precio del "oro negro", debido a la preocupación por la interrupción del suministro en esta región.

El precio del petróleo se ha incrementado a medida que la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus socios (OPEP+) relajan gradualmente los recortes de producción, pero varios productores más pequeños aún no pueden aumentar la oferta. Mientras tanto, algunos países se muestran cautelosos sobre sacar demasiado combustible al mercado cuando otros vuelven a imponer restricciones de viaje.

Según el pronóstico de los expertos, tras aumentar el 50 por ciento en 2021, el precio mundial de petróleo puede disparar en 2022, hasta 90 dólares por barril, debido a las limitaciones de capacidad productiva y la disminución de las inversiones. A pesar de la propagación de la variante Ómicron, numerosos gobiernos aún no están dispuestos a reponer las medidas preventivas más estrictas lo que impulsará la subida del precio de petróleo.

De acuerdo con un analista senior de la correduría financiera OANDA, en caso que la economía china no caiga bruscamente, la variante Ómicron no provoque impactos y OPEP no aumente su producción, el precio del petróleo Brent puede alcanzar los 100 dólares por barril en el primer trimestre de 2022.

Según las previsiones del banco Morgan Stanley, con la perspectiva de reducción de las reservas de petróleo, baja capacidad disponible en la segunda mitad de 2022 e inversiones limitadas en la industria petrolera, el mercado corre riesgos de presenciar escasa oferta y el precio del petróleo Brent alcanzaría los 90 dólares por barril en el tercer trimestre de este año.

Según los analistas, el precio podría subir unos 30 dólares por barril después del anuncio de la Administración de Información de Energía de Estados Unidos (EIA) y Bloomberg sobre el volumen de producción de la OPEP en 2022. Los expertos dejaron abierta la posibilidad de que la cotización sea de 125 dólares por barril este año y de 150 en el próximo.

El analista senior de Rystad Energy Company enfatizó que si la OPEP continúa su actual política petrolera y restringe la oferta, el precio mundial del combustible podría alcanzar los 100 dólares por barril. Sin embargo, este escenario es poco probable y que el precio mundial del petróleo puede superar 90 dólares por barril este año. La presión sobre los precios del petróleo también disminuirá cuando algunos países como Canadá, Noruega, Brasil y Guyana aumenten la producción.

Superando la interrupción a corto plazo debido a la variante Ómicron, se pronostica que la demanda mundial de petróleo en 2022 se mantenga. La OPEP prevé un aumento en la necesidad petrolera, sin cambios desde su pronóstico anterior, de cuatro millones 200 mil de barril por día.

La estabilidad del precio del petróleo depende de varios factores. Los científicos creen que la variante Ómicron causa una enfermedad más leve que las anteriores y ello genera optimismo sobre la recuperación económica en 2022, impulsando así la demanda de combustible. No obstante, la OPEP advirtió sobre el riesgo de eventuales nuevas variantes del virus SARS-CoV-2 y sus repercusiones sobre el mercado del "oro negro".