La perspectiva de que Ómicron sea la principal causante del Covid-19 en la UE en los próximos meses plantea preocupaciones sobre una nueva crisis de salud. Los líderes europeos pidieron impulsar soluciones para evitar la expansión de esa variante.
Ante las predicciones de que Ómicron será dominante en Europa a mediados de enero de 2022, la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen, advirtió que el continente está a punto de afrontar un “invierno de Ómicron” por el acceso desigual a las vacunas contra el Covid-19. En la actualidad, nueve de los 27 países miembros de la UE tienen una tasa de vacunación por debajo del 60 por ciento.
El nuevo brote el Covid-19 inflige graves daños a la economía de numerosos países del Viejo Continente. El crecimiento económico en la eurozona en diciembre disminuyó al nivel más bajo en los últimos nueve meses debido a interrupciones en las cadenas de suministro. Europa experimenta una vertiginosa subida de los precios: en noviembre, el índice de precios al consumidor (IPC) aumentó 4,9 por ciento en comparación con el 4,1 por ciento del mes anterior.
En Alemania, la locomotora la Eurozona, el IPC alcanzó en noviembre el nivel más alto en los últimos 29 años. La presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, señaló que la recuperación económica regional se verá afectada si Alemania endurece la política monetaria demasiado pronto.
Los países europeos, además, deben centrarse en buscar soluciones para asuntos como la prevención de la ola migratoria ilegal, la respuesta al cambio climático y especialmente la pandemia del Covid-19.
Italia, Irlanda, Portugal y Egipto han endurecido las restricciones de entrada a los visitantes de otros países de la UE. Se dice que las estrictas medidas preventivas están erosionando los principios de la certificación digital Covid-19, en vigor en todo el bloque desde julio pasado, con el fin de garantizar un conveniente movimiento transfronterizo para quienes completaron la pauta inmunizante.
La Cumbre de la UE enfatizó la necesidad de la vacunación contra el Covid-19 para todos los ciudadanos y la importancia de la administración de dosis de refuerzo, en un contexto en que los países europeos están a punto de enfrentar un invierno duro por la expansión de Ómicron.
