Hacia el mantenimiento de la paz y la estabilidad en el mundo

El nacimiento del acuerdo de defensa en la región indopacífica entre Australia, el Reino Unido y Estados Unidos (AUKUS) refleja su interés especial en esta región del mundo. Esto demuestra que el cambio en las prioridades estratégicas de los mencionados países puede provocar una disconformidad, causando fisuras en las relaciones con otros aliados cercanos.

Australia, Estados Unidos y el Reino Unido anuncian el acuerdo de defensa en la región indopacífica. (Fotografía: EPA)
Australia, Estados Unidos y el Reino Unido anuncian el acuerdo de defensa en la región indopacífica. (Fotografía: EPA)

La Unión Europea (UE) expresó su sorpresa por el nacimiento del AUKUS cuando este bloque no fue informado con antelación sobre el evento ocurrido el 15 de septiembre, en que Estados Unidos, Australia y el Reino Unido anunciaron el estratégico acuerdo. El acontecimiento suscita la preocupación por el hecho de que la UE se está quedando fuera de las decisiones clave de su alianza con Estados Unidos.

Con anterioridad, la UE se quejó de que tampoco se le consultó sobre la decisión de retirar las tropas de Afganistán, donde los países europeos se coordinan activamente con Estados Unidos en las operaciones antiterroristas.

Unas horas después de que los tres países anunciaron el nuevo acuerdo de defensa, la UE declaró una estrategia en el Indo-Pacífico. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, enfatizó que llegó el momento en que la UE debe establecer una propia alianza de defensa.

Francia fue el país que reaccionó con mayor dureza. El ministro de Asuntos Exteriores francés, Jean-Yves Le Drian, criticó que el nacimiento del AUSUK es una “puñalada por la espalda”, “una mentira”, “un doble discurso” y “una ruptura de confianza”.

Francia llamó a sus embajadores en Canberra y Washington y explicó que esa decisión se debe a la “gravedad especial” en el anuncio sobre el acuerdo de defensa de Australia, Estados Unidos y el Reino Unido.

El enfado de Francia se sebe a la decisión de Australia de cancelar un multimillonario contrato de submarinos negociado durante años entre estos dos países, optando en su lugar por adquirir buques estadounidenses de propulsión nuclear.

Mientras que el Reino Unido estaba convencido de que el nacimiento del AUKUS estaba justificado, Estados Unidos y Australia luchaban por encontrar una manera de "mimar" a su aliado. Washington afirmó que París sigue siendo un 'socio vital y uno de los aliados más antiguos'. Canberra explicó que la razón para cancelar el contrato con Francia era de interés nacional.

El primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, dijo que el AUKUS refleja el interés común en promover la democracia, la libertad marítima y el comercio internacional. De hecho, después de la salida del Reino Unido de la UE, este país debe buscar una nueva oportunidad para ampliar la cooperación en la región, concluyó.

El acuerdo de defensa AUKUS y la nueva estrategia de la UE muestran un creciente interés en la región indopacífica, a la vez que provocan desacuerdos entre los aliados. La garantía de los beneficios de los países y las alianzas es necesaria, pero el mantenimiento de la paz y la estabilidad es la meta a la que deben aspirar todas las partes.