Según el acuerdo entre los tres países, conocido como AUKUS, Washington y Londres apoyarán a Canberra en la tecnología y la capacidad para desplegar submarinos nucleares. Esta relación también incluye la cooperación en las áreas de inteligencia artificial, tecnología cuántica y ciberespacio.
Según funcionarios estadounidenses, esta es una decisión "histórica" de Washington en aras de contribuir a mantener la estabilidad en la región del Indo-Pacífico y su conversión en una zona “libre y abierta”.
El compromiso de unir fuerzas para alcanzar esos objetivos ha sido implementado de forma activa por Estados Unidos a través de una serie de actividades diplomáticas durante los últimos tiempos.
La vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, realizó su primera visita al Sudeste Asiático, región considerada por EEUU como "el corazón de Asia" y podrá determinar el éxito o fracaso de la diplomacia del país norteamericano en el Indo-Pacífico.
El punto culminante del viaje fue la inauguración de la Oficina regional de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades para el Sudeste Asiático, una importante contribución a la imagen de Estados Unidos en la región en la lucha contra la pandemia de Covid-19.
La producción y la distribución de vacunas contra el mortal virus es el "foco" de la mayoría de los debates en todo el mundo. Washington se esfuerza por aprovechar esta oportunidad, a través de sus compromisos de apoyar la lucha contra la enfermedad, para promover lo que Estados Unidos llama "política exterior prestigiosa" en la región del Indo-Pacífico.
En la primera cumbre del "Cuarteto de diamantes", integrado por Estados Unidos, Japón, Australia y la India, que tuvo lugar en marzo de 2021, el grupo afirmó que intensificará la cooperación para expandir la producción de vacunas con precios asequibles y seguros, así como promover la igualdad en el acceso a las vacunas en aras de poder brindar mil millones de dosis de antivirales en Asia a finales de 2022.
Al compartir intereses estratégicos en el vasto espacio del Indo-Pacífico es comprensible que Estados Unidos y otros países promuevan iniciativas de conectividad en la región, especialmente cuando la competencia entre las grandes potencias aumenta día a día y el mundo se ve seriamente amenazado por la pandemia y la crisis climática.
